Las acciones de Volvo ha alcanzado este viernes mínimos históricos tras registrar una caída del 11,14%, después de que su matriz, Zhejiang Geely Holding Group, haya vendido unas 100 millones de acciones y planee deshacerse de más.

Las acciones vendidas representan más del 3% de las que la empresa poseía y de las que ha relaizado la venta por unos 350 millones de dólares.

Según un comunicado, el objetivo de la operación es «ofrecer más oportunidades para generar valor sostenible a largo plazo para inversores institucionales y minoristas».

«Como accionista mayoritario, seguimos firmes en nuestro compromiso de continuar apoyando a Volvo Cars en su transformación para convertirse en un fabricante de automóviles totalmente eléctricos y esperamos continuar con esta historia de éxito global en curso».

Así lo ha expresado en un documento el director ejecutivo de dijo Geely Holding Group, Daniel Donghui Li. No obstante, la empresa continúa teniendo casi un 79% de las acciones de Volvo.

En lo que va de año, los títulos de Volvo acumulan ya un descenso del 25%.

En los nueve primeros meses del año, el beneficio neto de Volvo Cars cayó más de un 24%, hasta los 10.734 millones de coronas.