Este pasado jueves, ‘Gran Hermano VIP 8’ celebraba su décima gala en Telecinco. Conducido por Marta Flich, el programa se centraba en una nueva expulsión, la resolución definitiva de la repesca y unas nuevas nominaciones. Con el 77% de los votos, la audiencia decidía expulsar por segunda vez a la modelo Susana Bianca


Susana Bianca, en ‘GH VIP 8’

Mediaset

El programa había puesto en marcha una semana antes el proceso de repesca con tres aspirantes: Albert Infante, Pilar Llori y Luitingo. Según lo que habían explicado a la audiencia, los espectadores debían votar para que dos de ellos se quedasen en la casa. En una primera ronda de votaciones, Albert Infante fue el elegido por la audiencia y se convirtió en concursante de pleno derecho el pasado domingo. 

Tal y como anunció el programa, el jueves se resolvía el proceso de repesca con la entrada de Pilar o Luitingo según los votos del público. Pilar fue la elegida por la audiencia con un 51% de los votos. Siguiendo la lógica y las explicaciones del programa, el cantante de la BSO de ‘Operación Camarón’ tenía que abandonar definitivamente la casa tras este proceso de repesca. 

A los minutos de conocer la decisión de la audiencia, Marta Flich anunciaba que Luitingo podía quedarse como concursante de pleno derecho si Pilar Llori o Jessica Bueno decidían gastar 5.000 euros del premio final de todos los concursantes. 

Luitingo y Pilar Llori, en 'GH VIP 8'

Luitingo y Pilar Llori, en ‘GH VIP 8’

Mediaset

Lee también

Un cantidad más que significativa ya que la ‘segunda oportunidad’ y regreso a la casa de Susana costó 25.000 euros y el posible encuentro entre Oriana y su novio durante 3 minutos tenía un precio de 12.000 euros. Con esta opción a ese precio, Jessica decidió que su íntimo amigo Luitingo se quedase en la casa como concursante.

De esta forma, los tres aspirantes a la repesca se convirtieron en concursantes sin que los votos del público sirvieran para nada. Algo que a los espectadores y fans del programa indignó tras una semana votando a través de la aplicación, según las reglas del juego anunciadas en galas anteriores.