Las empresas tienen que hacer frente a nuevos retos. En la actualidad deben que promover acciones que beneficien a las personas y al medioambiente, y llevar a cabo sus actividades con transparencia. Unos aspectos que son esenciales para promover una gestión empresarial ética y efectiva, y fundamentales para alcanzar los objetivos relacionados con la sostenibilidad social y ambiental.
Atrás quedaron los días en que la confianza de los inversores era la única medida del éxito. Hoy en día, las organizaciones deben tener en cuenta cómo crean valor para una amplia gama de grupos de interés, desde accionistas y consumidores hasta empleados, proveedores y comunidades locales.
Para algunos sectores en particular -como la industria tabaquera- ganarse la confianza llevará aún más tiempo. Desde Philip Morris afirman: “mucha gente no confía ni en la empresa ni en la industria tabaquera en general. Por eso, en lugar de esperar una confianza implícita, pedimos a la gente que juzgue objetivamente nuestras acciones y revise nuestra ciencia”.
Información y transparencia para impulsar la innovación
Las empresas -y especialmente las multinacionales como Philip Morris International (PMI), con una extensa cadena de valor y grupos de interés en todo el mundo- tienen un importante papel que desempeñar para comprender su impacto y abordar los problemas a los que se enfrenta nuestro planeta. La elaboración de informes sólidos y transparentes ayuda a describir la estrategia de una empresa, cómo crea valor y cómo se comporta ante sus grupos de interés.
En este sentido, para esta empresa tabaquera informar sobre sus esfuerzos de sostenibilidad es algo “relativamente novedoso”, ya que su primer informe se publicó en 2016, pero aseguran que: “aunque antes de esa fecha contábamos con programas de sostenibilidad sólidos y duraderos, consideramos que cualquier enfoque de sostenibilidad sería discutible o poco sincero si no abordábamos y ofrecíamos un enfoque para tratar nuestro problema más importante: el impacto de nuestros productos en la salud”.
En este informe anual integrado se recoge tanto la evolución de la compañía en el marco ambiental, social y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés), así como información detallada sobre la visión estratégica, el rendimiento y el modelo de creación de valor de la compañía. Igualmente, presenta de manera sólida y comparable, los datos sobre la evolución en materia de ESG, incluyendo los relativos a la transformación de la compañía, con el objetivo de dar visibilidad y transparencia sobre el futuro sin humo hacia el que está trabajando.
Además, y como explica la Directora de sostenibilidad de Philip Morris, Jennifer Motles: “Abordar los impactos de nuestros productos sigue siendo el núcleo de nuestra estrategia. Por supuesto, empezamos centrándonos en su impacto sobre la salud. Más allá de eso, hemos establecido una clara distinción entre los impactos medioambientales y sociales que se derivan de nuestros productos (lo que producimos) y los impactos que se derivan de nuestras operaciones empresariales (cómo producimos). Además, hemos hecho del gobierno corporativo un componente integral de nuestra estrategia, reconociendo su importancia para integrar la sostenibilidad en la estrategia corporativa”.
Hoja de ruta de la compañía: objetivo 2025
Consecuentemente, la hoja de ruta de la compañía para 2025 ha sido renovada y, ahora, consta de 11 objetivos divididos en esas 8 estrategias que explican claramente los impactos sociales y medioambientales que PMI pretende conseguir. Además, la compañía ha introducido 19 indicadores concretos para mostrar con total transparencia cómo se evalúa el progreso, haciendo que su avance sea cuantificable y verificable, y vinculando su progreso con la compensación a largo plazo de sus directivos.
Bajo la premisa de colocar la sostenibilidad en el centro de la estrategia de la compañía, en cuanto al impacto operativo en materia de diversidad y liderazgo femenino, cerraron 2022 consiguiendo uno de sus principales objetivos en la materia: garantizando un 40% de representación femenina en puestos directivos.
A su vez, la compañía está realizando avances para lograr la neutralidad neta de carbono en sus operaciones directas en 2025. Según los datos proporcionados por la compañía, las emisiones de CO2 se han reducido un 18% y las emisiones de las operaciones directas han caído un 33% con respecto a 2019, momento en que se iniciaron las mediciones. Además, afirman que “la totalidad del tabaco adquirido por Philip Morris Internacional no ha supuesto riesgo de deforestación de bosques primarios ni protegidos”, así lo ponen de relieve en su Manifiesto de Deforestación Cero. Concretamente, en 2020 consiguieron cero deforestación bruta de bosques primarios y protegidos, y están trabajando para lograr una deforestación neta cero de bosques naturales gestionados y tener un impacto positivo neto en los bosques asociados con la cadena de suministro de tabaco para 2025. Todo esto muestra los esfuerzos de la organización para proteger la biodiversidad.