Podemos garantiza el voto de sus cinco diputados en la sesión de investidura de Pedro Sánchez, pero no la estabilidad de la legislatura. Este último extremo dependerá de que se levante el «veto» a su inclusión en el próximo Gobierno de coalición. La líder del partido y todavía ministra de Derechos Sociales en funciones, Ione Belarra, ha elevado el tono de amenaza esta mañana al considerar que tanto Pedro Sánchez como a Yolanda Díaz «todavía están a tiempo de rectificar». «Si persiste este error», ha avanzando, «están comprometidas las posibilidades de llevar adelante cambios reales» durante la próxima legislatura.
«El próximo Gobierno necesita motor Podemos«, ha insistido Belarra ante los medios de comunicación, visibilizando la ruptura anunciada con Sumar, el grupo parlamentario del que forman parten. Tanto es así, que ha reconocido que la líder del espacio, la vicepresidenta segunda en funciones, Yolanda Díaz, «no me llama desde julio». Lo que está en juego, ha dicho, es una «cláusula de exclusión histórica» que de consumarse llevaría a los morados a actuar con autonomía y dificultar la gobernabilidad al no plegarse a las directrices de su grupo.