El PP se ha indignado notablemente con las palabras que el portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Gabriel Rufián. Tanto que la secretaria general del PP y portavoz parlamentaria, Cuca Gamarra, ha pedido la palabra para exigir la aplicación y observancia del reglamento.
En concreto, Rufián ha pronunciado en su turno de palabra en la primera sesión del debate de investidura de Pedro Sánchez: “El lawfare, la utilización por parte de la derecha española de parte del poder judicial español para ganar con togas lo que pierden con votos. La guerra judicial en España es un montón de jueces en una sala del VAR al servicio del PP y de Vox. Quieren ejemplos de esta guerra judicial. Por ejemplo, meter en la cárcel a ocho chavales de Altxasua por una pelea de bar; inventarse un delito llamado violencia ambiental para meterle 100 años de cárcel a nueve demócratas por un referéndum; imputar por terrorismo a Marta Rovira porque a un señor le dio un infarto en una manifestación”.
Además, el líder catalán ha señalado directamente al juez Manuel García Castellón: “García Castellón, el mismo juez que aún no sabe quién es M. Rajoy. Que sacó de la cárcel a Ignacio González, que salvó a Cospedal de la Kitchen y que archivó lo del rey. ¡Qué casualidad! Todo esto es guerra judicial y negarlo es como negar que sale el sol y se pone para todos cada día. Existe porque en este país la derecha se cree que todo esto es suyo y tiene muy mal perder”.
La defensa del PP al poder judicial y al juez
Tras estas palabras y la intervención de respuesta de Pedro Sánchez, Cuca Gamarra ha pedido el turno de palabra para condenarlas y exigir que se retiren. “Pido la palabra en virtud del artículo 72 en nombre del grupo parlamentario popular para solicitar la aplicación y observancia del reglamento por las acusaciones que se han vertido en este pleno en la intervención del portavoz de ERC, Gabriel Rufián”, ha dicho.
“Pensaba no tener que hacerlo porque debiera de haber sido el presidente del Gobierno en funciones y candidato para seguir siendo presidente el que hubiera reprobado las acusaciones que se han vertido al poder Judicial y las que se han vertido con nombres y apellidos a un juez en nuestro país”, ha añadido en claro reproche a Sánchez.
Después, ha explicado sus motivos: “Por eso, lo que establece nuestro reglamento, en su artículo 103 y 104, es que sin duda alguna los diputados no pueden en sus intervenciones proferir palabras o conceptos ofensivos, para personas concretas o instituciones. Y aquí se ha acusado a los jueces, y a uno de ellos con nombre y apellidos, de prevaricar, de guerra sucia judicial”.
“Evidentemente esto es algo que no podemos tolerar ni permitir en esta cámara. Por lo tanto, pedimos que se retire del acta todas esas acusaciones gravemente vertidas e infundadas que atentan contra la separación de poderes y la independencia judicial”, ha sentenciado.