La estrella del baloncesto Marc Gasol ha resaltado este miércoles la importancia del “compromiso con el bien común” por encima del interés individual que, en su opinión, es clave para el éxito, tanto en el deporte como en la empresa porque, tanto en uno como en otro ámbito, “no todo vale para ganar”.

El que fuera jugador de la NBA desde 2008 hasta 2021 ha participado este miércoles en un diálogo con el empresario y fundador de la compañía de recursos humanos Eurofirms, Miquel Jordà, en la cuarta edición del foro sobre liderazgo empresarial y directivo CEO Congress que se celebra este miércoles en Murcia.

Allí ha explicado cómo decidió renunciar a la liga norteamericana para regresar a España a dirigir el equipo local Bàsquet Girona, y ofrecer formación deportiva a niños y adultos al sentir que había dado todo lo que podía dar como jugador profesional y sentirse “vacío” en lo personal.

Desde este nuevo proyecto, ha insistido en la relevancia que le da al valor del compromiso por el bien del equipo, sacrificando el interés individual como clave de éxito para los equipos, puesto que, en su opinión, cuando ese compromiso común falla, “es garantía de más debilidad”.

En ese sentido, ha señalado cómo en Estados Unidos se promueve “el espacio, la libertad de movimiento” tanto en la empresa como en el juego sin embargo, la Selección Española de Baloncesto supo demostrar cómo la “fuerza del grupo, la unión” podía superar la calidad individual de los jugadores norteamericanos.

Sobre el liderazgo, ha considerado que es algo que da “el tiempo y la experiencia”, ya que es necesario antes de liderar un equipo, formarse una identidad en base a referentes y valores aprendidos.

Además, ha considerado fundamental que el líder sepa “pensar más en el grupo que enfocarse en sí mismo”, de nuevo, en relación a ese valor central de la fuerza del grupo.

El multipremiado jugador ha reivindicado también el error como pilar básico del aprendizaje porque, en su opinión, “para crecer, hay que cometer errores y afrontarlos de manera positiva”.

También ha rememorado el regalo que le hizo uno de sus entrenadores: un espejo para mirarse en él, ha explicado, antes de emitir una crítica a otro compañero o hacia una actitud por un error cometido.

Por último, ha reflexionado sobre el impacto que los deportistas de élite puede tener en la sociedad y ha animado a los clubes a “dejar salir” a sus estrellas, permitirle participar en proyecto vinculados al desarrollo social y el apoyo a menores y colectivos vulnerables para darles “herramientas físicas y emocionales para gestionar su día a día”, puesto que no solo esos jugadores tendrán un impacto positivo entre los jóvenes, sino que ello repercutirá también en su propio bienestar.

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