Cuatro o dos agentes, dependiendo de las exigencias del servicio, durante 24 horas al día. Esa será, según fuentes policiales confirman a EL ESPAÑOL, la escolta de la que dispondrá Carles Puigdemont, el expresident de la Generalitat de Cataluña fugado en Bélgica de la justicia después de solicitársela al Gobierno con el que ha acordado aprobar la llamada Ley de Amnistía.

La mayoría de las escoltas a figuras públicas en todo el territorio las realiza la Policía Nacional, y por eso, previsiblemente la protección que tendrá Puigdemont será proporcionada por la Unidad Central de Protección, dependiente de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana.

Esta unidad asume la organización y ejecución de la protección de altas personalidades nacionales y extranjeras y de aquellas personas que se determinen, así como la de edificios y diversas instalaciones. De ella depende la Brigada Central de Escoltas, de donde se escogerán los agentes que protegerán a Puigdemont, pese a que él ha solicitado que sean agentes de los Mossos d’Esquadra quienes se dediquen a velar por su seguridad.

El prófugo Puigdemont reclamó este lunes que los Mossos d’Esquadra le escoltasen de forma «urgente» en Bélgica, ante el aumento de la peligrosidad por la tensa situación política. Lo hizo a través de uno de sus más estrechos colaboradores, Josep Lluís Alay (Junts), el jefe de su oficina, alegando un incremento del «riesgo hacia su persona» detectado «desde hace algunas semanas».

Este martes, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, expresaba que «nadie cuestiona la seguridad de las personas», por lo que es probable que «el Ministerio del Interior tramite» sin problemas la petición del expresident.

En el caso de una escolta integral, que probablemente es lo que el equipo de Puigdemont pedirá al Ministerio del Interior, departamento dirigido por Fernango Grande-Marlaska, supone tener agentes turnándose durante 24 horas de forma ininterrumpida. 

Aunque Bolaños no ha querido aventurarse a precisar una fecha concreta, ha reconocido que este año será «imposible» que se tramite la ley, sobre todo por las trabas que ya vaticinan que pondrá el Partido Popular en el Senado, pero que en 2024 estará aprobada «con toda seguridad». 

[Bolaños anuncia que Interior tramitará la petición de escolta de Puigdemont y que volverá a España en 2024]

Será entonces cuando Puigdemont regrese a España, cuando todos los delitos del procés hayan sido borrados de la historia y cuando reciba la protección de los escoltas que ha solicitado.

Una ley «sólida y constitucional»

Muchos policías consideran esta petición del líder del separatismo, que nunca se ha sentado ante un tribunal por los hechos acaecidos el 1 de octubre de 2017, como una total «humillación». El Sindicato Unificado de Policía (SUP), por ejemplo, añade que, a su juicio, «un prófugo de la justicia la única escolta policial que debe tener es aquella que le conduzca ante un tribunal de justicia».

También el sindicato JUPOL se pronuncia sobre la petición del líder de Junts. A JUPOL le parece «una contradicción y una aberración que los contribuyentes españoles tengan que hacerse cargo de la escolta de una persona huida de la justicia e investigado por delitos muy graves, incluso el de terrorismo».

Desde JUPOL instan a Puigdemont a que si cree que está comprometida su seguridad a quien debería solicitar la protección sería a las autoridades belgas, ya que es donde reside actualmente o bien a los servicios de seguridad del Parlamento Europeo en su calidad de eurodiputado.

Bolaños ha confirmaba en la misma entrevista que este lunes echó a andar la tramitación parlamentaria de la ley de amnistía y que no tiene dudas de que el Rey la firmará, pues «cumple escrupulosamente con sus funciones constitucionales».

No obstante, desde el PSOE prevén que el proceso se dilate, al menos, hasta 2024, porque vaticinan que el PP intentará dilatar el plazo que el Senado tiene para tramitar una norma con el objetivo, según el ministro “de boicotearla”.