Aunque hace ya tiempo que existe la posibilidad de comprar una vivienda utilizando criptomonedas, hasta ahora ninguna gran promotora se había atrevido a integrar esta alternativa en sus canales de venta habituales. La primera en hacerlo ha sido Metrovacesa, que se ha aliado con la ilicitana Bit2Me para desarrollar una aplicación que permite realizar la pre-reserva de un inmueble con moneda virtual y recibir un NFT con las características de la casa.
De momento, el wallet lanzado por estas compañías –bautizado como Kalio– solo aceptará pagos con USDT, una moneda virtual estable cuyo valor está vinculado al dólar estadounidense para evitar las fluctuaciones que caracterizan a estas divisas. Una vez que el cliente realice el pago de la vivienda, recibirá en su monedero un NFT (Non Fungible Token), como se denominan a los activos digitales encriptados que son únicos, que vendrá certificado por TrustOS, la plataforma especializada de Telefónica Tech.
Este NFT incluirá todas las propiedades de la vivienda, como calidades o dimensiones del inmueble, según explica el CSO de Bit2Me, Abel Peña, pero, además, será dinámico. Así, a medida que avance el proceso de compraventa, se irá actualizando con los distintos estados por los que pasan este tipo de operaciones –prereserva, reserva y contrato privado, hasta la entrega de la casa- y en cada uno de ellos se ofrecerán servicios y descuentos exclusivos para sus propietarios, según explican desde ambas compañía. Eso sí, será un token no transferible, lo que significa que no puede venderse.
Nuevas generaciones
Como apunta el ejecutivo de Bit2Me, el principal objetivo de esta iniciativa es acercarse a las futuras generaciones de compradores y, sobre todo, posicionarse de cara a la expansión de una tecnología cada vez más popular. Así, Abel Peña recuerda que los jóvenes que «ya han nacido en un mundo plenamente digital» ven como algo «normal» operar a través de internet con «activos digitales», por lo que acabarán demandando que esta posibilidad se extienda a todo tipo de bienes, incluidos los inmuebles.
A su juicio, con este movimiento, Metrovacesa se adelanta a la competencia y se prepara para un futuro, que el experto no ve tan lejano. Por ejemplo, Peña señala que la buena marcha de la cotización de monedas como el Bitcoin –que ha duplicado su valor desde el pasado mes de diciembre- puede llevar a que los inversores decidan recoger los beneficios generados y destinarlos a otro tipo de inversiones, como el inmobiliario. «En España seguimos teniendo en el ADN que, cuando tenemos dinero, el destino más seguro es el ladrillo», recuerda el directivo, por lo que aquellas compañías que faciliten la adquisición de propiedades con criptomonedas podrían verse beneficiadas.
Eso sí, las nuevas tecnologías aún no evitan tener que pasar por la notaría para formalizar cualquier compraventa. En este sentido, además, el CSO de Bit2Me recuerda que, aunque el pago se realice en moneda virtual, lo que recibe al final el vendedor son euros. De hecho, esta transformación es uno de los servicios en los que está especializada la firma ilicitana, que ha desarrollado una pasarela específica –Commerce- para que cualquier comercio pueda aceptar pagos en criptomonedas.
Bit2Me fue la primera empresa en obtener el registro del Banco de España como proveedor de servicios de monedas virtuales y ofrece toda una serie de soluciones para la compra, gestión y venta de este tipo de activos. En la actualidad, el volumen de transacciones que mueve la compañía ilicitana ya supera los 1.000 millones anuales.
