El precio de los alquileres sigue aumentando con fuerza en la provincia de Alicante, marcado por el fuerte desajuste que, según los profesionales, se produce entre la oferta y la demanda. Especialmente, en aquellas poblaciones o barrios más dinámicos.

De acuerdo con los datos facilitados este lunes por el portal Fotocasa, en el mes de octubre el precio medio del metro cuadrado alcanzó en el conjunto de la provincia los 10,68 euros, lo que supone un incremento del 14,3% con respecto a hace un año. Una subida algo más moderada de la que se llegó a experimentar justo antes del verano, cuando la subida interanual superó el 20%, según el portal, aunque hay que tener en cuenta que el precio base sobre el que se compara también es cada vez más elevado, lo que afecta a ese porcentaje.

En cualquier caso, se trata de un incremento muy superior a la media nacional -ya que en el conjunto del país la subida de los arrendamientos se sitúa en el 7,1%-, aunque algo por debajo del dato autonómico, que se sitúa en el 17,2%. De esta forma, Alicante es la novena provincia donde más se encarecen los pisos de alquiler, por detrás de Tenerife, con una subida del 25,5% interanual; Baleares, con un 21,3%; Valencia, con un 21,1%; Girona (+18,2%); Segovia (+17,3%); Guadalajara (+15,3%); Teruel (+14,8%); y Málaga (+14,8%).

Un interesado mira las viviendas que se ofrecen en una inmobiliaria alicantina. Héctor Fuentes


A pesar de este fuerte avance, lo cierto es que los precios medios en Alicante aún son ligeramente más bajos que en el conjunto del país. En concreto, un 4,9%, ya que la media del metro cuadrado a nivel nacional está en 11,23 euros. También sigue bastante alejado de los 17,46 euros que se abonan mensualmente en Barcelona, la provincia más cara, o los 16,76 euros de Madrid.

En cualquier caso, poco consuelo para quienes busquen arrendar en estos momentos, ya que con los niveles actuales un piso de 80 metros cuadrados supone un desembolso mensual de 854 euros, y uno de 100 metros supera los mil euros. Unas cantidades a las que cada vez un menor porcentaje de la población puede llegar.

Poblaciones

En cuanto a la evolución por poblaciones, entre las analizadas por Fotocasa, Santa Pola es la que más incrementa sus precios, con una subida interanual del 19,7% en octubre, hasta alcanzar los 12,39 euros por metro cuadrado. En segundo lugar se sitúa Benidorm, donde los alquileres suben un 17,9%. Con una media de 15,61 euros (es decir, 1.561 euros mensuales para una vivienda de 100 metros), la capital turística de la Costa Blanca es la población con los alquileres más caros de todas las que aparecen en el estudio en la Comunidad Valenciana –una veintena de los mayores municipios de la autonomía-, lo que ya genera problemas a los empresarios de la zona para atraer trabajadores.

Por detrás, la tercera mayor subida sería la de El Campello, con un 14,2%, hasta los 12,08 euros por metros cuadrado; seguida por la ciudad de Alicante, con un aumento del 14% (12,16 euros); y Alcoy, donde los alquileres repuntan un 13,9%, aunque sigue siendo notablemente más asequibles, con una media de 6,22 euros por metro.

Por su parte, en Torrevieja el aumento interanual contabilizado por el portal es del 8,7%, hasta los 10,21 euros; y en Altea, del 2,4%, hasta los 11,48 euros.

Una inmobiliaria en Benidorm. David Revenga


Más presión

Los datos de Fotocasa confirman que sigue la presión sobre el mercado de alquiler, donde la falta de una oferta adecuada –es decir, que se ajuste a las zonas y los requerimientos que necesitan los inquilinos- mantiene la tensión al alza en los precios. Una tensión que se habría incrementado en los últimos meses, tras la entrada en vigor de la nueva Ley de Vivienda que, al elevar la protección de los inquilinos, habría desincentivado a muchos propietarios.

Así, un reciente informe de la Asociación de Inmobiliarias de la Comunidad Valenciana (Asicval) cifraba en un 40% la reducción de los pisos disponibles tras la entrada en vigor de la nueva normativa. Por su parte, la subida de los tipos y el consiguiente encarecimiento de las hipotecas está desviando a cada vez más población hacia el arrendamiento a la hora de buscar un hogar, ya que no pueden hacer frente a las cuotas para devolver el préstamo.