El fenómeno ultra paso este miércoles por las calles de San Sebastián y el estadio de Anoeta. Los aficionados más radicales del Benfica dejaron escenas de violencia antes del partido y la liaron durante el mismo con el lanzamiento de bengalas. Hubo detenidos por las peleas y también identificados e imputados otros más en el interior del campo de la Real Sociedad.

Todo comenzó unas horas antes del choque de Champions League que medía a la Real Sociedad contra el Benfica, y que acabó en victoria txuri-urdin (3-1). El encuentro se jugaba a las 18:45 horas y antes de que fueran las 18:00 se produjeron hasta cuatro arrestos -tres de aficionados del Benfica y uno de la Real- por las trifulcas que incluyeron el arrojo de mobiliario de algunos locales de hostelería y más bengalas.

El principal foco de los altercados fue la plaza de La Armería. En redes sociales empezaron a aparecer vídeos que mostraban la violencia de ambos bandos radicales y el terror entre el resto de personas, que se refugiaban en locales de la zona o grababan lo que ocurría desde los balcones. Se atendió a diez heridos.

Dentro de Anoeta, el peligro siguió desde el sector en el que se concentraba la hinchada lusa. Algunos radicales encendieron bengalas en su zona, que está prohibido, y lanzaron hasta tres de ellas a la grada inferior, ocupada en su mayoría por aficionados de la Real Sociedad.

Los cuerpos de seguridad actuaron, requisando multitud de objetos considerados potencialmente peligrosos e identificando e imputando a varias personas que cometieron los actos violentos en el interior del estadio.

Jokin Aperribay, presidente de la Real Sociedad, se vio obligado a comparecer en rueda de prensa al término del partido. Señaló que el club donostiarra «perseguirá penalmente a los delincuentes que han lanzado bengalas a la afición local» en Anoeta.

«Si esos delincuentes tienen que ir a la cárcel, lo harán», destacó tajantemente Aperribay, y recalcó que «la Real Sociedad va a poner todos los medios posibles para perseguir a los radicales» del conjunto lisboeta. «Hay suficientes cámaras en la zona de la grada visitante local, identificamos a todos para que la policía sepan quiénes son», recalcó el máximo mandatario txuri-urdin.

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Se quiso disculpar el presidente de la Real con la afición y recalcó que lo sentía mucho, ya que pese a haber tratado de hacer la mejor labor posible, «por desgracia ha habido material que no se ha podido incautar. Se ha requisado un montón de material a la afición del Benfica como bengalas o petardos, aunque está claro que no ha sido suficiente».

Aperribay fue más allá, incluso, y valoró que no le hubiese importado que el árbitro hubiese detenido el partido. «Lo que importa es el aficionado de la Real Sociedad y su bienestar», apuntilló el presidente realista.

Sobre los altercados previos en los aledaños del estadio, Aperribay afirmó que los cuerpos de seguridad estaban al tanto de lo que podía ocurrir. «Han evitado que haya más personas perjudicadas», recalcó el presidente sobre una actuación policial que se ha saldado con varias detenciones. Sobre el aficionado de la Real arrestado, aclaró que «no es socio del club» txuri-urdin. La violencia empañó una jornada histórica de la Real en la Champions League.

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