¿Cómo habría sido la historia de la televisión de este país sin la figura de Belén Esteban? La colaboradora sin filtros, la mayor fuente de ‘memes’ (que hasta ella misma disfruta protagonizando) y la sencillez personificada a pesar de su éxito infinito. Un fenómeno único en España. Y es que el título de Princesa del Pueblo no es en vano (o de Patrona, como quiere que la llamen ahora). Aquella joven tertuliana que empezó en los programas siendo la ‘mujer del’ torero Jesulín de Ubrique evolucionó hasta deshacerse de cualquier categorización que implicara a alguien más que a ella misma, como mujer, con sus éxitos y desaciertos. Ha representado un ejemplo de superación y desarrollo de su propio personaje hasta convertirse en el icono social que es hoy en día.
No todo ha sido un camino de rosas. María Belén Esteban Menéndez también ha estado muchas veces en el centro de las críticas, ha vivido momentos delicados en su vida privada (que, obviamente, ha explicado siempre abiertamente en la televisión) y ha estado a punto de caer en la oscuridad más profunda de la fama. Su fuerte carácter a veces ha abrumado, sus opiniones no siempre han gustado y su imagen se ha visto desgastada en algunos momentos a lo largo de estos años. O la amas o la odias.
Belén cumple este jueves 50 años en un momento complicado: el programa de su vida, ‘Sálvame’, fue cancelado de Telecinco el pasado verano. Aunque forma parte de la nueva versión que se estrena en Netflix, ‘¡Sálvese quien pueda!’, y está centrada en el crecimiento de su empresa de alimentos, actualmente no tiene ningún proyecto en la televisión tradicional. Algunos expertos en televisión y prensa del corazón analizan el fenómeno Belén Esteban, y cómo los avatares de su vida, expuestos ante los medios, han conectado con los problemas y debates sociales como nunca antes.
Salto a la fama
La princesa del pueblo llegó a la televisión cuando salió a la luz su relación con el torero Jesulín de Ubrique. Muchos la acusaron entonces de aprovecharse del tirón de su noviazgo para dar el salto a la fama. «Su primera oportunidad, de la mano de Ana Rosa Quintana, nos descubrió a una joven que parecía insegura y débil y que resultó ser un cohete: potente, con carisma, sincera…», analiza la periodista y colaboradora de ‘TardeAR’, Silvia Taulés. «Fue muy rompedora al no ser políticamente correcta y consiguió que la gente empatizara con ella», apunta Laura Fa, integrante del pódcast de las Mamarazzis en El Periódico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica.
Fue muy rompedora al no ser políticamente correcta y consiguió que la gente empatizara con ella»
En poco tiempo, Belén se ganó el cariño de la audiencia. «Con los años ha aprendido de televisión, a tener gancho, saber explicar las cosas y conectar con la gente», añade la colaboradora televisiva. «Belén tiene todos los ingredientes para haber sido la protagonista de una súper exitosa serie de televisión: una mujer de origen humilde, que ha superado una infinidad de problemas, pese a que la vida se lo haya puesto difícil en más de una ocasión, que ha sabido reinventarse y que jamás ha escondido quién era o intentado ser algo que no es», indica, por su parte, la periodista Lorena Vázquez.
La madrileña siempre se mostró sin filtros, espontánea y sencilla, como cualquier persona de a pie. «Lo de la Princesa del Pueblo no era gratuito», considera el colaborador de El Periódico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica, y tertuliano de ‘Aruseros’, Òscar Broc. El personaje también evolucionó y pasó de ser la ‘mujer de’ Jesulín de Ubrique y explicar su vida privada a tener «un papel como personaje propio capaz de generar fans y ‘haters'», explica Laura Fa, que distingue dos etapas en su carrera profesional: «antes de sus problemas de salud, cuando era una mujer mucho más kamikaze e incontrolable, y después, cuando su papel en la tele cambió» y demostró su valía.
Supervivencia y superación
La televisión engulló a la colaboradora y acabó enfrentándose a la dureza del mundo de la noche y las drogas. Pero lejos de que esto le jugara una mala pasada, y después de años de oscuridad, consiguió usarlo a su favor «y convirtió sus más que tonteos con la droga en una lección de vida«, apunta Taulés. «Belén cambió la forma de hacer televisión al mostrase auténtica, es decir, al mostrar la cara amable y también la más dura del éxito. Lo hizo de manera descarnada», añade la periodista. También demostró ser una luchadora, «o al menos ella ha sabido venderse así», reflexiona Broc, y se convirtió en un ejemplo de superación tras superar sus adicciones, sus rupturas amorosas y la crianza en solitario de su hija.
«Acaba teniendo los problemas que tiene muchísima gente, separaciones, custodia, malos rollos con los suegros, drogas, enfermedades… Los ha explicado con naturalidad y no miente, muestra sus debilidades», manifiesta Laura Fa. Y es que Belén hizo de la televisión el salón de su casa: «Fue ella quien empezó a merendar en directo, hablar de bajones de azúcar por su diabetes, a no dudar en defender a su hija por encima de todo. ¡Si hasta descubrió su cara recién operada en directo!», enumera Silvia Taulés.
Aunque quizás su vida personal ya no interesa tanto, creo que al culebrón de la Esteban todavía le quedan algunos episodios»
Princesa del pueblo
Como princesa del pueblo, sus opiniones políticas siempre han tenido gran relevancia en la población. Y ella nunca las ha ocultado. «No sé si tiene o no poder a la hora de convencer con sus argumentos o sus reflexiones, pero, sin duda, logra dar voz y visibilidad a muchas personas que piensan lo mismo que ella y no tienen un altavoz», remarca Lorena Vázquez.
«Sus teorías a veces son muy populistas y llegan a gran parte de la población, pero sí que se moja. Además, ha confesado públicamente que ha ido cambiando de partido político y, si alguna cosa que hace un partido no le gusta, lo dice abiertamente», asegura Laura Fa. «Me consta que muchos partidos políticos le han ofrecido que trabaje para ellos de alguna manera como imagen o forme parte de una campaña. Ella siempre se ha negado, pero tiene gran poder», añade.
Estrella televisiva
Con el paso del tiempo, Belén se volvió un rostro indispensable para Telecinco y ahora la televisión se ha quedado huérfana tras el final de ‘Sálvame’. Mediaset se enfrenta ahora a un futuro incierto tras la pérdida imparable de audiencia, en parte, impulsada por la salida de sus colaboradores más míticos. «Hubo un tiempo en que se dijo que la cotización de Mediaset en el Ibex35, sin Belén Esteban, tendría un valor mucho menor. Hoy Mediaset ni siquiera cotiza en la Bolsa española«, sentencia Ferran Monegal, crítico de televisión de El Periódico de Catalunya.
Con el fin del programa, la Esteban participa en la nueva versión de La Fábrica de la Tele en Netflix, el docu-reality ‘¡Sálvese quien pueda!’. Belén también se ha convertido en una empresaria de éxito con su marca de alimentación Sabores de la Esteban y últimamente cierra algunas colaboraciones como ‘influencer’ en Instagram. Eso sí, no se conocen nuevos proyectos televisivos en los que vaya a participar. ¿Está acabada la faceta televisiva de Belén?
Mirada al futuro
Òscar Broc considera que todavía es «un personaje al que se le puede sacar jugo». «Aunque quizás su vida personal ya no interesa tanto, creo que al culebrón de la Esteban todavía le quedan algunos episodios«, argumenta, ya que «la evolución del personaje es fascinante», ha pasado muchas fases, y cree «que todavía no hemos visto su última versión».
En el actual espacio televisivo hay pocos programas en los que su personaje tenga cabida de la manera que a ella le interesa»
Silvia Taulés considera que el final abrupto de ‘Sálvame’ la ha puesto de golpe «ante el abismo de no tener su espacio» y «hará lo posible por volver». «Eso sí, siempre que el proyecto le interese y le dé la libertad de la que ha gozado en los últimos años. Si ella quiere, puede seguir sin parar, aunque en el actual espacio televisivo hay pocos programas en los que su personaje tenga cabida de la manera que a ella le interesa«, analiza la periodista.
Por su parte, Laura Fa asegura que la colaboradora «todavía tiene mucho espacio en la televisión» porque ya ha superado lo que era en los inicios, la exnovia de un torero, «y ya es un personaje en sí mismo«. «Me consta que le han llegado ofertas, pero es una mujer muy fiel y luchará porque la Fábrica de la Tele siga teniendo proyectos con ella», desvela la Mamarazzi.