El Valencia CF no solo juega contra el Real Madrid cuando visita el Santiago Bernabéu. También contra el árbitro de turno. La historia de los Real Madrid-Valencia está repleta de injusticias arbitrales. Curiosamente siempre a favor de los blancos. El Valencia ha salido gravemente perjudicado de sus visitas a Chamartín. Así ha sucedido temporada tras temporada para la indignación y la rabia de muchos presidentes, entrenadores, jugadores y, por supuesto, aficionados. Salir escaldado de la capital se ha convertido en una tradición. Que se lo pregunten a Rubén Baraja por ejemplo. El Pipo lo sufrió en su carnes como futbolista. Ahora cruza los dedos para que no le pase el sábado como entrenador. El técnico confía en la profesionalidad del colegiado. No le queda otra. El club, mientras tanto, está alerta por lo que pueda pasar. El historial de atracos es demasiado largo.
El Valencia deberá tener mucho cuidado. Y más después de que el Real Madrid haya puesto en marcha su habitual campaña de presión sobre los árbitros. Empezó el domingo a la finalización del partido con tra el Rayo Vallecano. La televisión oficial del club atribuyó el pinchazo liguero a la actuación arbitral de Munuera Montero señalando al colegiado de actuar con premeditación contra los blancos: «El resumen es que en caso de duda, evidentemente, esto no se va a pitar. A unos le ponen alfombras y a otros piedras». Así se las gasta el club. El Valencia estará hoy muy atento a la designación del Comité Técnico de Árbitros (CTA). Peligro es poco.
Un historial muy largo
El Valencia tiene motivos para desconfiar. Así se lo recuerda su propia historia. El club explotó hace dos temporadas en la 21/22 cuando el Hernández Hernández señaló un penalti inexistente de Alderete a Casemiro. «Lo de los robos en Madrid empieza a ser algo repetitivo, La Casa de Papel», escribió el Valencia en sus redes sociales. Es el último atraco en el Bernabéu. El primero fue en 1930 cuando el colegiado Fausto Martín anuló tres goles legales al Valencia. El capitán del equipo Amorós reunió a sus compañeros y abandonó el terreno de juego a falta de quince minutos del final como señal de protesta en un gesto para la historia.
El goteo de injusticias arbitrales desde 1930 hasta 2022 ha sido continuo. Sobre todo a principio de siglo cuando el Valencia luchaba por todo. Adrian Ilie vio cómo en la 01/02 se le anulaba incomprensiblemente un gol. Un año después Pablo Aimar fue expulsado por una falta inexistente sobre Míchel Salgado. El gran robo se produjo en el año el Doblete (03/04) con el penalti inexistente de Carlos Marchena a Raúl González que el rodillo mediático madridista calificó de ‘Ushiro-Nage’.
Fue el día de la famosa portada de SUPER de «La misma chorizada de siempre». El Valencia campeón molestaba. Igual de grave fue la expulsión de David Albelda en la 10/11 por unas manos que nunca existieron. El capitán se llevó la mano a la cara diciendo: «¡Qué cara tienes árbitro, qué cara tienes!». El colmo llegó en la 12/13 con un gol con la mano de Higuaín, un penalti claro de Carvalho no señalado y tres fueras de juego inexistentes a Roberto Soldado. La visita de la 19/20 (esta vez al Di Stéfano en plena pandemia) también estuvo envuelta de polémica con un gol mal anulado a Rodrigo Moreno por fuera de juego. El siguiente fue el robo de La casa de papel, pero no será el último. Los atracos en el Bernabéu son una historia interminable. El próximo capítulo el sábado. Alerta.