Mientras el Ejército de Israel mantiene su asedio sobre la Franja de Gaza, en las últimas horas la comunidad internacional ha elevado la presión sobre el gobierno de Netanyahu para que establezca una «tregua humanitaria» que permita atender a los heridos causados por los bombardeos israelís y facilite la salida de refugiados y civiles extranjeros.

Entre el viernes y el sábado, los gobiernos de Australia, Bélgica y Japón han emitido distintos comunicados en los que solicitan a Israel un alto el fuego de carácter humanitario. En un artículo publicado en The Guardian este viernes, la ministra de exteriores australiana, Penny Wong, ha anunciado que su Ejecutivo ha unido su voz a la de otros muchos países de la comunidad internacional para conseguir que Israel permita la entrada de ayuda humanitaria en Gaza aprovechando una pausa en los bombardeos.

«Comida, agua, medicina, combustible y otra ayuda esencial deben llegar a las personas en necesidad urgente y los civiles, incluidos australianos, deben poder ponerse a salvo», ha especificado la ministra.

Asimismo, la ministra de Asuntos Exteriores belga, Hadja Lahbib, ha pedido un alto el fuego humanitario en una entrevista publicada este sábado en el periódico Le Soir, donde también se ha declarado partidaria de la creación de dos Estados para poner fin al conflicto que libran israelíes y palestinos desde hace décadas. «Solo encontrarán la paz cuando logren vivir uno al lado del otro en dos Estados», ha declarado la canciller, quien también ha añadido: «Las operaciones militares no deben desplegarse masiva e indiscriminadamente hasta el punto de atacar a civiles».

Japón también pide una pausa

Por su parte, la ministra japonesa de Asuntos Exteriores, Yoko Kamikawa, ha solicitado públicamente a Israel que ordene una «pausa humanitaria» en la ofensiva militar que desarrolla contra Hamás para garantizar la llegada de ayuda de primera necesidad a la Franja de Gaza.

Se da la circunstancia de que esta petición la ha hecho en Tel Aviv, ciudad israelí que ha visitado este viernes en la gira de cuatro días que la ministra nipona está realizando por Israel y Jordania. La canciller japonesa también ha anunciado que Japón ofrecerá 65 millones de dólares (unos 60,5 millones de euros) en ayudas destinadas a la crisis humanitaria que se vive en la Franja de Gaza tras los ataques emprendidos por Israel, cantidad que se suma a otros 10 millones de dólares antes aportados por Tokio.

Kamikawa trasladó estos mensajes a su homólogo israelí, Eli Cohen, durante una reunión celebrada el viernes en Tel Aviv, así como al responsable palestino de Exteriores, Riad Malki, en otro encuentro celebrado en la misma jornada en Ramala.

La emisora pública japonesa NHK ha anunciado este sábado que las autoridades se están preparando para una posible evacuación de unos 800 ciudadanos japoneses que permanecen en Israel y los territorios palestinos, citando al Ministerio de Asuntos Exteriores del país.

Diplomacia en acción

La guerra no solo se libra sobre el terreno, también se combate en los despachos y en las últimas horas las cancillerías de medio mundo han estado muy activas para tratar de contener los daños humanitarios que está causando la guerra que Israel libra contra Hamás.

Este sábado, los ministros de Exteriores de Jordania, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Egipto y Qatar se reunirán con un alto funcionario de la Autoridad Palestina en Ammán, para tratar de detener los combates en la Franja de Gaza y las muertes de civiles. Tras esta reunión, los representantes diplomáticos de Oriente Medio se verán con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.

El representante estadounidense, que se encuentra estos días de gira en la región, ha recordado al gobierno de Jerusalén que debe hacer más para proteger a los civiles palestinos atrapados en el fuego cruzado entre Hamás e Israel. Asimismo, ha reiterado su petición de «hacer pausas humanitarias» en los combates para ayudar la llegada de ayuda y permitir que los ciudadanos extranjeros puean abandonar Gaza.

Sin embargo, el Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha vuelto a rechazar un alto el fuego con Hamás que no incluya la liberación de los rehenes israelíes que siguen presos en Gaza. El mandatario utilizó su discurso televisado del viernes para advertir a Hezbolá que no debe abrir un segundo frente contra Israel.

Por su parte, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, que en días pasados acusó a Israel de estar cometiendo «crímenes de guerra» en Gaza, ha declarado este sábado que su país no se plantea romper lazos diplomáticos con Israel y que él no ve a Netanyahu como su enemigo. «La ruptura total de los lazos no debería ocurrir en la diplomacia internacional. Por lo tanto, estamos utilizando todos los medios de la diplomacia a través del Ministro de Asuntos Exteriores, Hakan Fidan, el jefe de inteligencia Ibrahim Kalin y otros ministros», añadió el mandatario turco.

Macron propone una conferencia humanitaria

Por otra parte, el presidente Emmanuel Macron anunció este viernes la celebración de una conferencia humanitaria internacional para ayudar a la población civil de Gaza en medo del bloqueo y la ofensiva militar israelí.

La cumbre tendrá lugar el 9 de noviembre en París y movilizará a los principales actores implicados en la respuesta humanitaria, desde oenegés a Estados, pasando por organizaciones internacionales.

Según detalló el Ministerio de Exteriores francés en un comunicado, la reunión se centrará en tres áreas: acciones a favor del respeto al derecho internacional, la protección de los civiles y los trabajadores humanitarios; la respuesta internacional en sectores básicos como sanidad, agua o energía, y el apoyo a las organizaciones humanitarias presentes en el terreno.

Las autoridades francesas han elevado de 35 a 39 el número de ciudadanos franceses que murieron en los ataques de Hamás en Israel el 7 de octubre. Actualmente, nueve ciudadanos franceses siguen desaparecidos, algunos de los cuales están rehenes de Hamás.

Por su parte, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU ha señalado este sábado que los combates en Gaza han dejado ya 9.257 muertos y 23.516 heridos hasta la medianoche del viernes. El Ministerio de Salud de Gaza, dirigido por Hamás, ha elevado la cifra de víctimas hasta las 9.488.