A Yon González le suelen tocar papeles de joven íntegro y seductor (‘Gran Hotel’, ‘Los herederos de la tierra’, ‘Bajo sospecha’). Pero en ‘Memento mori’, la traslación a la pantalla que ha hecho Amazon Prime Video de la primera de las novelas de la trilogía ‘Versos, canciones y trocitos de carne’ de César Pérez Gellida, el actor se sale de su registro habitual y el resultado sorprende. Interpreta a un perturbado sociópata que dejará un reguero de cadáveres en Valladolid mientras es perseguido por un inspector (Francisco Ortiz) y establece una peculiar relación con una enigmática mujer (Olivia Baglivi).
¿Conocían la novela o corrieron a leérsela cuando les dieron sus papeles en la serie?
Yon González: Yo no la conocía. Prefería leer primero los guiones y después la novela, para incorporar los datos que me faltaban para la construcción del personaje y para ver lo que mi imaginario había creado y podía aportar al libro.
Olivia Baglivi: Mi caso fue parecido. Lei el guion y luego la novela, no solo por sacar más información del personaje sino también para imaginarme la atmósfera e impregnarme del universo que propone César. Creo que en la serie se respira la esencia de la novela.
Francisco Ortiz: A mí me hablaron del proyecto antes de que estuvieran los guiones, así que pude disfrutar de la novela como mero lector. Gracias a eso me enamoré del personaje.
¿Precisamente del suyo, del inspector Sancho, ese policía de lo más íntegro?
Francisco Ortiz: Sí, me sentí muy cercano a él desde el primer momento, creo que coincidimos en muchas cosas. César tiene una manera de escribir en la que incluso llegas a empatizar con el asesino porque deja fuera cualquier tipo de juicio respecto a lo que está haciendo. Trata de que entiendas el origen y el germen de por qué cada personaje hace lo que hace.
Yon, ¿ha sido un reto hacer de psicópata?
Yon González: Sí, me suele tocar el protagonista ético, moral, y de repente poder hacer un personaje con tanto hueco a nivel emocional, donde te dan unas escenas para ver hasta dónde puede llegar tu maquinaria, ha sido un gusto.
¿Se ha basado en algún psicópata en particular? Porque Augusto, su personaje en ‘Memento mori’, tiene mucho del Patrick Bateman de ‘American Psycho’.
Me encantan actores como Christian Bale en ‘American Pshycho’, Anthony Hopkins en ‘El silencio de los corderos’, Joaquin Phoenix en ‘Jocker’, y me gusta desde dónde trabajan. Pero para este personaje no he pensado en nadie. Eso sí, me he tirado tres meses y medio de preparación del personaje en casa, absorto solo para la serie. Escuchaba ‘Bravo’ [de Enrique Bunbury y Nacho Vegas] todo el día porque cada palabra de esa canción tiene mucho significado en mi personaje.
Tendría que trabajar mucho las expresiones faciales también.
Sí, para contar esa impotencia, ese dolor, ese odio, esa frustración, ese miedo, esa ira que siente. Para que el público entienda dónde le ha colocado toda la tortura psicológica y física que ha sufrido.
¿Dirían que Valladolid es un personaje más en ‘Memento mori’?
Yon González: Valladolid y la lluvia.
Francisco Ortiz: Sí, Valladolid es un personaje más y una gran ciudad para contar una historia como esta. Su geografía, su clima, el Pisuerga… le dan todos los ingredientes necesarios para abrazar un ‘thriller’ como este.