El conflicto entre Elena Tablada y Javier Ungría se recrudece. A tan solo unos meses de que se celebre el juicio que decidirá la custodia de la hija que tienen en común, varios periodistas aseguran que la empresaria ha pedido a su ex unas pruebas médicas que certifiquen que su estilo de vida es el adecuado para estar con la pequeña.
Ante el movimiento de su expareja, él ha respondido de manera contundente, y ha dejado claro que no tiene que explicar mucho. «Cuando formas parte de un procedimiento judicial es un mal momento para hablar con tus amiguitos de la desinformación», ha dicho.
Y es que, a pesar de que el resultado de los análisis todavía es un misterio, Javier ha asegurado que está tranquilo.
Un cruce de acusaciones que llega en un momento delicado para la diseñadora, que está cansada de esperar un juicio que parece no llegar, ya que estaba previsto para diciembre, pero han tenido que aplazarlo.
Además, Elena estaría pasando por difíciles momentos económicos. «Todo el mundo que quiere trabajar, trabaja», ha sido la dura respuesta de su expareja, con quien dejó la relación después de que salieran a la luz unas imágenes de su pareja besándose con otra mujer.
¿Conseguirán llegar a un acuerdo por el bien de las niñas?