Todo el mundo dice, cuenta, intuye, afirma que los comentarios que Àlex Márquez, piloto del equipo Gresini Racing Team, le ha hecho, a lo largo de toda la temporada, a su hermano Marc han podido ser, de hecho lo han sido, seguro, decisivos para que el ocho veces campeón del mundo haya decidido abandonar, a final de la presente temporada, el equipo Repsol Honda, librarse amistosamente del año que aún le restaba de contrato con la firma japonesa, y firmar, por una sola temporada, la próxima, con el cuarto equipo de la fábrica Ducati.
Àlex, que está teniendo una temporada con dientes de sierra y que, en las últimas carreras, ha empezado a recuperarse de la fractura de tres costillas, es de los convencidos, de lo contrario su hermano no hubiese dado este espectacular cambio a su carrera deportiva, que MM93 está capacitado para pelear por el título la próxima temporada, incluso pilotando la Ducati ‘Desmosedici’ del 2023, mientras ‘Pecco’ Bagnaia, Enea Bastianini, Jorge Martín y Franco Morbidelli, sustituto de Johann Zarco en el equipo Prima Pramac, pilotarán la del 2024.
Marc será feliz
Àlex, que ya le ha dicho a Marc que será él quien mantengan el lado derecho del ‘boxe’ del ‘team’ Gresini “porque me lo he ganado, así que él cambiará de lado al llegar a nuestro equipo”, considera que “la próxima temporada pinta bien, pinta bonita. Estuvimos juntos en 2020 en Honda, pero no duró mucho por su lesión en el brazo, pero la vida a veces da segundas oportunidades y creo que esta es muy buena. Pienso que él también se va sentir muy a gusto, como yo me he sentido desde el primer momento”, explica el pequeño de los Márquez Alentá.
“Claro que hay bromas, la primera va sobre qué lado del ‘boxe’ va a ocupar cada uno, pero ya está clarísimo: él va a cambiar de lado, se va a ir al lado izquierdo”, sigue explicando el líder del proyecto Gresini en MotoGP. “Ya le he dicho que llevo un año y también Nadia (Padovani viuda de Fausto Gresini y dueña de la escudería), me ha dicho: “Tú estás a la derecha y de ahí no te mueves”.
Año clave
El menor de los Márquez Alentá está convencido de que “será un año clave para los dos; un año importante porque él es ocho veces campeón del mundo y estaremos en el mismo ‘boxe’. Ojalá desde el principio sea rápido porque cuanto antes sea rápido él, antes me podré aprovechar yo, ¿no? Estoy con ganas de que él también pruebe la moto (Honda ya le ha dado permiso a Marc para que pueda subirse a la Ducati en el test posterior al último GP de Valencia) y me dé su opinión. Es verdad que siempre se ha dicho que tu primer rival es tu compañero de ‘boxe’ y así es, pero esa complicidad y esa rivalidad te ayuda a que tú también des un paso adelante».
Àlex Márquez está convencido de que los dos pueden pelear, la próxima temporada, por acabar entre los tres primeros del Mundial de MotoGP. «Ojalá sea así. Para mí será un año muy importante, como he dicho, un segundo año con la misma moto y equipo; tenemos que intentar hacer cosas grandes. Creo que tengo la velocidad y sólo falta consolidarme, ser más sólido y no cometer tantos errores. Si conseguimos empezar bien el año, por qué no estar luchando; no lo digo tanto por el título, porque un año es muy largo y hay que cuadrar muchas cosas, pero sí por estar constantemente en el top 5 y, al final, del año intentar acabar entre los tres primeros del del Mundial».