El Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA, del Hospital Clínico de Valéncia, ha recogido una de las becas de la Asociación Española de Cirujanos para proyectos prospectivos multicéntricos, dotada con 10.000 euros, para el desarrollo del «Estudio 3D-PANC». El acto de entrega de este galardón ha tenido lugar en la Sala Sinfónica del Auditorio de la Diputación de Alicante durante la XXIV Reunión Nacional de Cirugía.
El estudio, con una duración de dos años, responde a la necesidad de validar científicamente la precisión de la tecnología de imagen en tres dimensiones (3D) frente a la tomografía computarizada (TC) convencional en el estadio preoperatorio de pacientes con adenocarcinoma de páncreas (ACP) borderline o localmente avanzado. El objetivo es poder determinar con mayor acierto a qué pacientes se les puede extirpar con éxito un tumor pancreático y a qué pacientes no, evitando una cirugía innecesaria.
«3D-PANC», que podría representar el primer estudio de validación clínica prospectiva de este tipo de tecnología 3D en pacientes sometidos a quimioterapia preoperatoria por cáncer de páncreas, tiene como investigadores principales a los doctores Marina Garcés y Dimitri Dorcaratto, del Grupo de Investigación en Cirugía General y Digestiva de INCLIVA. Ambos son médicos adjuntos de la Unidad de Cirugía Hepato-Bilio-Pancreática del Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Clínico de València, dirigido por el doctor Luis Sabater, y profesores asociados del Departamento de Anatomía de la Facultad de Medicina de la Universitat de València.
Se trata de un estudio prospectivo y multicéntrico en el que van a participar otros 16 centros de referencia en cirugía pancreática a nivel nacional.
La cirugía y la quimioterapia representan en la actualidad los dos únicos pilares del tratamiento curativo del cáncer de páncreas. Sin embargo, solo el 20% de los pacientes con adenocarcinoma de páncreas son operables directamente.
Tomografía computerizada
En los pacientes que inicialmente no se pueden operar, por ser los tumores demasiado extensos-, el tratamiento con quimioterapia antes de la cirugía ha demostrado ser beneficioso y permite la extirpación de esos cánceres en casos seleccionados. La tomografía computarizada (TC) es la técnica de elección para determinar la extensión del tumor y saber si es extirpable mediante cirugía. Sin embargo, es muy difícil de interpretar en los pacientes que se tratan con quimioterapia antes de la cirugía.
Debido a estas dificultades de interpretación de la tomografía computarizada, un elevado número de pacientes (hasta el 62%), que reciben quimioterapia preoperatoria y podrían ser operados, no llegan a ser operados y otros, con tumores que no se pueden extirpar (hasta el 33%), se someten a intervenciones agresivas que finalmente no aumentan la supervivencia.
El problema clínico que se plantea es si se puede mejorar la imagen para conseguir que aquellos pacientes en los que realmente se puede quitar el tumor tras la quimioterapia lleguen a la intervención y en los que la quimioterapia no ha sido eficaz y los tumores no son extirpables, no se operen inútilmente. Las nuevas tecnologías aplicadas a las técnicas de imagen han mostrado ser capaces de reconstruir de forma tridimensional los tumores de páncreas con una precisión hasta ahora inalcanzable, muy superior a las de tomografías computarizadas.
Los investigadores del «Estudio 3D-Panc», que utilizarán el método 3D-MSP, consideran que la validación de un método eficaz para la evaluación preoperatoria mediante la aplicación de estas tecnologías permitirá dar respuesta a problemas en la práctica clínica actual, al permitir planificar de manera más precisa la intervención que se va a realizar, aumentando el número de pacientes a los que se puede extirpar un tumor pancreático y reduciendo el número de pacientes que se someten a una cirugía innecesaria, además de disminuir las complicaciones postoperatorias y los costes asociados.
Estos modelos 3D, además, facilitan la comunicación con los pacientes ya que estos pueden ver fácilmente y entender la situación de la enfermedad y de la intervención que necesitan mucho mejor que cuando se explican sobre la imagen de tomografía convencional. Si bien estas tecnologías ya se están utilizando de forma incipiente en la práctica clínica diaria, su uso no ha sido validado científicamente.
La obtención de mayor evidencia clínica sobre el uso del método 3D-MSP para el estudio preoperatorio de estos pacientes podrá facilitar la expansión de su uso en los pacientes con cáncer de páncreas e impulsar futuros desarrollos basados en las mejoras tecnológicas de los modelos actuales. Además, este estudio permitirá incrementar el conocimiento de la respuesta de los pacientes con ACP a la terapia neoadyuvante.
Toda la tecnología 3D-MSP, que se pretende validar, está desarrollada por la empresa CELLA medical solutions. En el desarrollo del programa 3D para páncreas, en concreto, ha colaborado el doctor Luis Sabater, investigador de INCLIVA, jefe del Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Clínico de València y catedrático de Cirugía de la Universidad de Valencia.