Sanidad busca equiparar las condiciones de la plantilla del hospital de Dénia a la del resto de trabajadores de la pública

Así lo avanzó el responsable autonómico en su primera visita el centro hospitalario tras conocerse la reversión del mismo para que la gestión pase a manos de la Conselleria tras estar en manos de la empresa Marina Salud. El futuro preocupa a los actuales trabajadores del centro para los que Gómez lanzó un mensaje «de tranquilidad». La intención del conseller es reunirse con ellos para plantear todas las cuestiones necesarias: «Ya me reuní con el comité de empresa y sorprendentemente nadie se había reunido en la etapa anterior con ellos. Fue una reunión muy positiva y les lanzamos mensaje de tranquilidad».

El Consell va a ir poco a poco cerrando todos los flecos de aquí al 30 de abril, momento en el que acaba la concesión que está en manos de la mercantil. «Hay que entender que estamos ante una situación donde no se puede arreglar ni en 6 meses, ni en 8, ni en 12» pero anticipó que sí se tiene en cuenta la situación de los trabajadores: «Sí anticipo que estamos planificando sacar un decreto ley o un marco normativo de tal forma que el estatuto jurídico del personal sea igual para todos, no haya personal de primera ni de segunda como había en tiempo pretéritos». El objetivo es que los profesionales de los departamentos de salud que pasarán a gestión directa como los de Dénia, y que serán subrogados, cuenten con el mismo régimen jurídico que el resto de personal de la sanidad pública.

Sobre si Sanidad ha planificado si hará falta ampliar la plantilla tras la reversión y después de la falta de personal que vive el centro hospitalario, Gómez añadió que el «trabajo que tenemos que hacer ahora en seis meses es hacer un cálculo racional de la situación de la coyuntura actual con perspectiva de futuro» y concretar «un estudio sensato» que permita «equilibrar todas las aristas que puedan existir para que no repercuta ni un ápice en la prestación sanitaria de los ciudadanos».

Como ya publicó este diario, el pasado 20 de octubre, la Conselleria de Sanidad anunció que se hará cargo de la gestión directa de los departamentos de salud de Dénia y Manises, una decisión que ha sido tomada tras el análisis de la situación de cada departamento, el clima social y laboral generado en ambos, así como la necesidad de garantizar la seguridad jurídica. Así también anunció que el hospital del Vinalopó seguirá en la misma situación y no se revertirá.

En el caso de Dénia, se ha acordado con la empresa concesionaria que continuará hasta el 30 de abril, ya que están pendientes trámites administrativos necesarios para llevar a cabo el proceso. Para todo ello, ya se publicaron anuncios previos a la licitación de determinados servicios y se han solicitado diversos informes a la Abogacía de la Generalitat para evitar una inseguridad jurídica que pudiera generar problemas en la prestación de la asistencia.  

Evitar problemas como en Torrevieja

De lo que sí habló el conseller es de cómo quiere Sanidad que sea la «transición» de un modelo de gestión a otro público: «Rigurosa, sensata y ordenada». El departamento autonómico quiere que se haga de la mejor manera posible y evitar por todos los medios que sea «caótico» como ocurrió en Torrevieja o en Alzira, todo para que «no se afecte lo más mínimo a la calidad de asistencia de los ciudadanos».

El responsable de Sanidad ha realizado su primera visita institucional al centro hospitalario de la Marina Alta tras anunciarse hace unos días la reversión del mismo que pasará a ser de gestión pública tras estar en manos de la empresa Marina Salud. Gómez se ha reunido con la gerente del departamento de salud de Dénia, Pilar Navarro, el resto del equipo directivo y profesionales del departamento, a los que ha informado sobre este proceso de transición, que se realizará de forma ordenada desde el punto de vista logístico, de la infraestructura y del personal. Alcaldes y concejales del PP de la comarca han acudido al centro a recibir al conseller.

El cambio de modelo de gestión se hará de «forma rigurosa, sensata y ordenada, porque cualquier tipo de decisión que tomamos se toma desde el punto de vista de la eficacia, eficiencia, desde el punto de vista técnico y para que no repercuta lo más mínimo en la calidad asistencial a prestar en el área que se toma la decisión, en este caso, en la de Dénia», repitió varias veces el conseller. «Queremos huir de prejuicios ideológicos, de precipitaciones, porque queremos hacer todo desde la perspectiva de la calidad al ciudadano y en la ausencia de cualquier tipo de ideología».

En cuanto a la situación con la empresa, «no me cabe la menor duda que vamos a tener colaboración por parte de la empresa. La prueba es que hemos llegado a un acuerdo», recalcó. Y reconoció que «ha habido cierto retraso por el año especial que estamos viviendo, un año electoral y a nadie se le escapa que desde que se ganaron las elecciones ha pasado tiempo hasta el cambio de gobierno y llevamos un retraso de alrededor de dos o tres meses».