No se trata de dudar de que Rodrygo quiere mucho a Ancelotti, pero no hay manera de no ver en esa frase una declaración pública de paz después de que, en el último parón internacional, el brasileño se quejara de la querencia reciente de su entrenador de alinearle como delantero centro.

Rodrygo: «No me gusta jugar de 9»

«Siempre he dejado claro que tengo facilidad para jugar en las bandas. Simplemente, no me gusta jugar de ‘9’, aunque en mi club tengo que hacerlo. Aquí, en la selección (Brasil), puedo moverme por todo el campo, lo que ayuda a mi juego», aseguraba Rodrygo en su país, como si creyera que lo dice allí no llega a Madrid y al resto de rincones del mundo.

Ocurre que Rodrygo, además, no estaba en condiciones de quejarse mucho, pues su inicio de temporada venía siendo (y aún lo es) bastante deficiente en materia de producción goleadora. El que ha marcado en Braga solo ha sido el segundo del curso, después de marcar en la visita al Athletic de la primera jornada de LaLiga.




18

Champions League | Braga – Real Madrid, en imágenes

«Lo necesitaba», resumió Vinicius, muy contento por el tanto de su «hermano». «Los delanteros estamos contentos cuando marcamos. Rodrygo siempre juega bien, pero necesitaba este gol para ganar confianza», insistía el hombre que le sirvió la asistencia para ese gol que abrió la cuenta blanca en el minuto 16.

«Tenía muchas ganas de marcar. Estaba en un momento de mala suerte con el gol, lo intentaba de todas maneras y no salían los goles. Estaba haciendo buenos partidos y hoy no he jugado tan bien, pero he marcado«, reconocía el chico, en una lectura que refrendó Ancelotti, valorando su buen hacer en los encuentros previos pese a no ver puerta.

Rodrygo: «Quiero mucho al míster»

«Quiero dar las gracias al míster, que seguro que verá luego esta entrevista. Me ha transmitido confianza, me ha motivado y me ha tranquilizado», le reconoció el delantero brasileño, antes de declararle su amor: «Le quiero mucho».

UEFA Champions League – SC Braga vs Real Madrid. Hugo Delgado


Ocurre también, paradójicamente, que el gol fue el clásico gol de ‘9’, esa posición que tanto le disgusta. Apareció en el área pequeña, se anticipó a su marcador y aprovechó el pase raso de Vinicius para marcar su 16º gol en la Champions, «una competición muy especial para mí, como todo el mundo sabe».

Y es que pese a sumar 42 partidos de Champions frente a 118 de LaLiga, el brasileño solo ha marcado un gol menos en la competición continental que la doméstica. Un idilio al que parece sumarse Bellingham, goleador en los tres partidos de Champions de este curso y que, según Ancelotti, podrá jugar el clásico el sábado sin problemas, pese a tener que retirarse con molestias justo antes del descuento.