Parece que la vida se empeña en arrebatarles la felicidad a Tolga y a su hermana. Después de deshacerse de su padre y poder empezar una vida nueva, han tenido un contratiempo: Leyla ha sufrido un accidente y está ingresada en el hospital muy grave.

Tolga, con lágrimas en los ojos, no se ha despegado ni un solo momento del cristal a través del cual puede ver a su hermana y repite una y otra vez: “Eres fuerte”. Oğulcan tampoco le ha dejado solo ni un segundo en este complicado y duro momento. ¿Quién les iba a decir que pasarían de ser enemigos a amigos?

El hermano de Aybike tampoco puede aguantarse las lágrimas y, preocupado por su amigo, le aconseja que se siente un rato… ¡lleva horas de pie! “Ver a mi hermana me hace sentirme bien”, le confiesa el hijo de Tarhan a su amigo.

Para tratar de convencerle, el hijo de Sengül le dice a Tolga que necesita descansar… ¡seguro que su hermana quiere verle con fuerzas una vez despierte! Tal afirmación ilumina por completo la cara del hijo de Tarhan.

«Eres el amigo que todo el mundo querría tener», le dice Tolga a amigo. Después, ambos se funden en un cariñoso abrazo. El hermano de Leyla, más animado, afirma que en algún momento Leyla se despertará y estará bien. ¡Esperemos que así sea!