Las quejas de ciudadanos y ciclistas por la agresividad de los perros que mataron a la joven de Zamora, Arancha Corcero, este lunes, 23 de octubre, eran muy frecuentes, si bien nunca llegaron a formalizarse ni ante la Guardia Civil ni ante el Ayuntamiento de La Hiniesta, donde se ubica la explotación ganadera del pastor, ni tampoco ante el Consistorio de Roales del Pan.
A pesar de estos incidentes, el último vivido por un grupo de ciclistas el sábado pasado que se vieron forzados a desviarse por otros caminos, la Guardia Civil ha confirmado a La Opinión-El Correo de Zamora que no existe ningún expediente contra el pastor abierto por infringir ninguna normativa legal.
En todo caso, el propietario de los perros ha prestado ya declaración este martes durante algo más de una hora en la Comandancia de la Guardia Civil de Zamora como investigado por homicidio imprudente.
El dueño de los canes no está detenido ni ha sido puesto a disposición judicial porque no han concluido las diligencias de la Guardia Civil que se remitirán al juzgado, han precisado fuentes de la investigación.
Según fuentes consultadas, los animales permanecen en cuarentena hasta que las diligencias policiales estén más avanzadas y la jueza decida en base a los informes técnicos sobre su destino, de acuerdo con los informes recabados, si es preciso sacrificarlos o no, ya que no siempre se da esa orden, indican fuentes consultadas.