Viendo las imágenes que llegan de Gaza, y antes de Israel, es difícil escribir que “cuando se declara la guerra, la verdad es la primera víctima”, como afirmara Sir Arthur Ponsonby en 1928. Sin embargo, los principales medios de comunicación del mundo, desde la BBC al New York Times, desde el Washington Post a la revista TIME, andan muy preocupados por cumplir con su papel de informadores objetivos, ante un conflicto que polariza como pocos y que constituye en sí mismo un campo de batalla de medias verdades, bulos descarados, mentiras interesadas y una propaganda que hunde sus raíces en los peores años de la Guerra Fría.