El gran armario ropero que Inditex abrió de par en par hace 20 años en Zaragoza se hace más grande y gana nuevos compartimentos. El gigante textil ha tejido en la capital aragonesa el corazón de su logística nacional e internacional. Desde aquí distribuye las prendas femeninas de Zara, la principal marca del grupo, a las 1.885 tiendas que tiene repartidas en casi un centenar de países por todos los rincones del planeta. Además de la reciente ampliación del gigantesco almacén que opera en el polígono Plaza, que cuenta con una superficie construida de 24 hectáreas, acaba de sumar otra planta de 63.356 metros cuadrados en una parcela próxima para centralizar las devoluciones de los pedidos online. El espacio está gestionado por el proveedor ID Logistics, que inició la actividad hace un mes y medio con 250 trabajadores, una plantilla que prevé duplicar.
Por si fuera poco, la multinacional que preside Marta Ortega dibuja en el horizonte nuevas instalaciones logísticas de tamaño XXL en el entorno de la capital del Ebro, donde prepara también la apertura de una megatienda de Zara. Todo ello hace que Aragón sea tras Galicia el mayor motor del imperio español de la moda, una ubicación que se ha convertido en el traje a medida que necesitaba la compañía para su expansión internacional gracias a las ventajas y capacidades que le ha brindado este territorio.
El hermanamiento de la compañía gallega con Zaragoza comenzó en 2003, cuando puso en marcha una de las piezas clave del milagro de Zara con una planta de 120.000 metros cuadrados. Fue bautizada como Plataforma Europa porque inicialmente abastecía a las tiendas del continente, pero hace ya años que tiene un enfoque mundial. Bien lo saben en el aeropuerto que está a apenas dos kilómetros de este gran complejo, que ha despegado hasta erigirse en el segundo de España en mercancías gracias a las decenas de vuelos que cada semana van y vienen con sus manufacturas textiles.
Con el tiempo, se ha convertido en el principal centro de operaciones logísticas de Zara, el buque insignia del imperio de la moda (más del 70% de la facturación). Desde entonces el crecimiento ha sido imparable, con una actividad que se ha catapultado por el incesante crecimiento de la firma de moda, lo que ha llevado a duplicar la superficie construida en este emplazamiento. Por sus kilométricas cintas transportadoras pasan millones de prendas a la semana, un engranaje en el que trabajan actualmente más de 2.000 trabajadores, 1.700 de ellos indefinidos. La plantilla se ha multiplicado por cinco desde los 400 que tenía en sus inicios y todo apunta a que seguirá creciendo.
La última inversión en este complejo, de más de 80 millones de euros, ha sido un silo robotizado de ropa colgada, de 14.800 metros cuadrados de superficie y 30 metros de altura. Se trata de la segunda instalación de estas características que la compañía de Amancio Ortega levanta en este centro logístico. El primero, de 17.500 metros cuadrados y la misma altura, se puso en funcionamiento en 2013.
Alianza con el proveedor ID Logistics
El nuevo armario robotizado, al que la compañía denominada shuttle (lanzacera en inglés) es un sistema de almacenamiento dinámico donde se guardan en bloques millones de prendas de ropa. Empezó a funcionar el pasado verano y está a pleno rendimiento de cara a la Navidad, según confirmaron fuente de la empresa. La nueva instalación, unida al almacén principal por una pasarela aérea, se completa con un edificio de servicios auxiliares para la recepción de mercancías y un aparcamiento de camiones.
A dos manzanas de la Plataforma Europa empezó a funcionar el pasado 4 de septiembre una nueva actividad logística de Inditex. En este caso, se trata de un centro para recepcionar y gestionar las devoluciones del comercio electrónico del grupo, una actividad que no es baladí teniendo en cuenta que en el sector retail se retornan entre el 20% y el 30% de las compras. Para llevar a cabo esta operativa, que incluye la revisión de estado de las prendas o su reacondicionamiento, el promotor inmobiliario Almericost ha construido una nave de 63.356 metros cuadrados sobre un solar de más de 100.000. Cuenta además con 476 plazas de estacionamiento y 62 muelles para la carga de camiones.
El gigante textil no gestiona este centro directamente, sino que ha derivado el encargo a uno de sus proveedores de cabecera, el grupo francés ID Logistics, fuertemente asentado en Zaragoza, donde también gestiona tres almacenes logísticos de Alcampo. Trabajan de momento 250 personas, pero la previsión es que llegue a superar los 500 empleados. Este volumen de mano de obra se suma al millar de empleos que generan las auxiliares textiles de Inditex, entre las que sobresalen ThinkTextil o Lacor.
A 26 kilómetros de Plaza, en el polígono Malpica, han empezado los movimientos de tierras para levantar otra instalación colosal para Inditex. La promotora inmologística Montepino, de origen aragonés, impulsa la reconversión de la antigua Universidad Laboral de Zaragoza en un moderno complejo logístico. La mayor de las cinco naves que se construirán, de 102.190 metros cuadrados, será para el gigante textil. Aunque la compañía no se pronuncia sobre este proyecto, su nombre aparece en el Plan de Interés General de Aragón (PIGA) aprobado por el Ejecutivo autonómico para agilizar la inversión. La apuesta del grupo por esta ciudad se completa con la macrotienda de 5.000 metros cuadrados que Zara abrirá en la antigua sede de la CAI (propiedad de Ibercaja), situado en pleno paseo de la Independencia, centro neurálgico de la capital aragonesa.