Unos 21 millones de venezolanos inscritos en el padrón electoral están habilitados para participar este domingo de la primaria de la oposición que debe allanar el camino de un candidato común para enfrentar en las urnas a Nicolás Maduro en los comicios previstos para el segundo semestre de 2024. La elección interna pone a prueba en más de un sentido el acuerdo político que el madurismo y sus adversarios suscribieron en Barbados el pasado martes con el patrocinio de Noruega, la secreta colaboración colombiana y el visto bueno de Estados Unidos y la Unión Europea. En virtud de ese entendimiento, Washington levantará las sanciones económicas contra Caracas de manera gradual en la medida que se garantice una contienda transparente y con la presencia de observadores internacionales el año venidero. El documento suscrito en Barbados es claro al respecto al defender el «derecho de cada actor político de seleccionar su candidato para las elecciones presidenciales de manera libre».
Es ese mismo párrafo de un texto amplio y ambicioso el que debe mostrar su viabilidad en esta primaria de la que participan 11 candidatos, pero, de acuerdo con las estimaciones previas, tiene una segura ganadora: la ultraderechista María Corina Machado, quien ha tomado clara distancia de los acuerdos de Bridgetown. La abanderada de Vente Venezuela había sido inhabilitada por la Contraloría para ejercer cargos electivos cuando estalló el conflicto interno, en 2014. Elvis Amoroso, quien en la actualidad encabeza el Consejo Nacional Electoral (CNE), la acusó de promover sanciones externas contra el Palacio de Miraflores. En junio pasado, la sanción, que había cesado años atrás, fue extendida por otros 15 años. Por entonces recién se calentaban los motores de la primaria, pero Machado ya comenzaba a insinuarse como una potencial favorita.
Tras el apretón de manos en Barbados entre representantes del Gobierno y la oposición fueron excarcelados en Caracas varios presos políticos. Washington ha saludado ese paso dado por el Palacio de Miraflores. Algunos analistas creen no obstante que si Machado gana las primarias y se mantiene la prohibición pueden resurgir las tensiones.
Camino sinuoso
El proceso que desemboca en las primarias no estuvo exento de problemas. La semana pasada se bajó de la competencia Henrique Capriles, otro de los dirigentes sobre los que pesa una inhabilitación de la Contraloría. Con su gesto dijo querer contribuir a la designación de un candidato consensuado que no estuviera limitado por una medida estatal. Machado miró hacia otro costado. «El 22 de octubre vamos a votar con fuerza porque es el primer paso para derrotar a Maduro y a los cómplices y corruptos de lado y lado, el candidato lo eliges tú, no el régimen», pidió la candidata en las vísperas de la primaria. «Los que estamos aquí y los que están afuera regálale ese día a Venezuela, sal a votar muy temprano y quédate en vigilia, defiende tu voto y cuenta papelito por papelito. Esta oportunidad de oro la tenemos que cuidar porque nos la quieren robar los mismos de siempre».
En la noche del viernes, Acción Democrática (AD, socialdemócrata) pidió este viernes a la Comisión Nacional de Primaria (CNP) que postergue la elección interna debido a supuestas irregularidades que, según la formación, «imposibilitan» realizar con normalidad la jornada. La autoridad de la CNP, Jesús María Casal, desestimó en los hechos esa solicitud al llamar a la ciudadanía a participar masivamente en 3000 centros de sufragio en toda Venezuela y en 77 ciudades de 28 países. Unos 55.000 venezolanos están en condiciones de hacerlo en España. «La primaria desde el primer día ha querido ser un mecanismo para reconciliar a los venezolanos. Es la oportunidad para participar en la construcción de una candidatura unitaria».
Escenarios posibles
El antimadurismo decidió llevar adelante este proceso sin el apoyo CNE. La dirección del organismo electoral había puesto como condición de asistencia técnica que la primaria se realizara a fines de noviembre.
De una manera u otra, el resultado aparentemente cantado de esta elección interna definirá el modo en se plantearán las disputas entre la oposición y el Gobierno. El analista Luis Vicente León no duda de la victoria contundente de Machado. «No hubo un solo momento a lo largo de todo el proceso de negociación, ni en lo informal ni en lo formal, en que el gobierno venezolano produjera ningún tipo de negociación de la habilitación». La líder de Vente Venezuela tiene dos alternativas si se confirman las previsiones de su triunfo: proclamarse ganadora y llamar a desconocer la proscripción en la calle, haciendo estallar el acuerdo de Barbados, o dar un paso al costado, como Capriles. Sus declaraciones no invitan a imaginar el segundo desenlace. Machado, dicen algunos observadores, esperará las reacciones de Estados Unidos.
León llama a seguir con atención el nombre del candidato que quede en segundo lugar en la primaria, siempre y cuando obtenga una votación significativa. «Va a exigir el derecho a ser el candidato unitario por sustitución del inhabilitado, si este no logra inscribirse».