Aún deben faltar unas pocas semanas (tampoco muchas) para que los anuncios de turrones lleguen a las televisiones, pero en Gijón la Navidad ya asoma. O, mejor dicho, empieza a colgar entre las fachadas de los edificios porque en estos días han dado comienzo las labores para instalar los adornos festivos. La empresa Germán Vizcaíno, la que históricamente se viene encargando de prender la mecha navideña a este lado del Cantábrico, cuenta con un equipo de 62 empleados para llenar de luces, ornamentos en tres dimensiones y figuras casi cada rincón de la ciudad y un puñado de ellos de la zona rural. Empiezan por estas fechas porque son tantas las luces que hay que poner por aquí y por allá que de otra forma no les daría tiempo. Solo el año pasado la Navidad llegó a 153 calles, 28 plazas y ocho parques. La preinstalación comenzó, de hecho, ya hace varias semanas con la colocación de los cables, algo que pasó más desapercibido. La idea es empezar en las zonas más alejadas del centro e ir poco a poco llegando al corazón de la ciudad… y al de los gijoneses.

El número exacto de luces que se colocarán este año está, por ahora, por decidir. De la Navidad lo que se sabe es que, tal como avanzó LA NUEVA ESPAÑA, la Cabalgata de los Reyes Magos partirá de Montevil el 5 de enero. El año pasado lo hizo desde Viesques. Fue un éxito de público, aunque hubo ciertas quejas por la música y algunas de las carrozas. Esta será la primera desde el regreso de Carmen Moriyón a la Alcaldía. Divertia trabaja en el programa navideño. Un trabajo que ya se había adelantado antes de que estallara la crisis que terminó con la salida de Vox del tripartito, con Sara Álvarez Rouco fuera del gobierno local y con Oliver Suárez fuera de Vox pero no de la presidencia de Divertia. Otro de los asuntos que ya está claro es que se da por hecho –o casi– que habrá «Estrellona». El año pasado este adorno fue la atracción de los Jardines del Náutico. Está por ver si triunfará esta vez en el mismo emplazamiento. El encendido de las luces será a primeros de diciembre. Pero este martes, con el calor reflejado en los termómetros, la Navidad empezó a llegar.