En el mundo globalizado lo que un día parece muy lejano acaba siendo cercano. Quizá el ejemplo más claro, por desgracia, fue la pandemia mundial por covid, que empezó en China y se movió rápidamente por todo el mundo globalizado. También veíamos como muy lejana la posibilidad de que la plaga de chinches de Francia llegase a España, pero ya ha llegado y con creces.
En Madrid, especialmente en Vallecas o Lavapiés, hay focos importantes. También en el País Vasco o Comunidad Valenciana. Y Zaragoza tampoco se ha librado.
Las chinches son unos pequeños insectos planos que se les conoce también como chinches de dormitorio. Se esconden muy, muy bien, en cualquier lugar. Pueden ir pegadas en una maleta, en una toalla, en ropa y, por supuesto, lo más normal es que se adhieran a la cama.
Ahí esperan al momento óptimo y atacan a su presa, en este caso nosotros, mordiendo. Aunque como los mosquitos también se alimentan de sangre, a diferencia de ellos las chinches lo hacen mordiendo, por lo que duele más.
En un famoso hotel
Las chinches han llegado a Zaragoza también. Chanel actuó en Zaragoza la noche del 11 de octubre y tanto ella como su equipo durmieron en un conocido hotel de la capital aragonesa. Pese a que en los hoteles la higiene es máxima y se cambian las sábanas a diario, se esconden tanto que es complicado detectarlas.
Es lo que le pasó a una bailarina de Chanel. María Pérez mostró en TikTok cómo se le quedó el cuerpo tras las picaduras de las chinches. «Me han devorado, literal. Nos pusieron en un hotel que era una fantasía», explica intercalando fotos de la habitación.
«Me levanté sin ronchas pero por la tarde me empezó a picar muchísimo el cuerpo y por la noche no pude dormir casi nada del picor, no paraba de rascarme, de hecho me he hecho heridas», relata.
Después comenta que fue a una farmacia y que le dieron una pomada para el picor y por la noche fue al hospital por el picor, aunque solo le dieron un antihistamínico y le explicaron que no se pega.