Domino’s Pizza ha presentado al mercado unos resultados trimestrales mixtos. La cadena de comida rápida ha obtenido en el tercer trimestre un beneficio neto de 147,6 millones de dólares, lo que supone un 47% más respecto al mismo periodo del año anterior, cuando obtuvo 100,5 millones de dólares.

Esto se traduce en un beneficio por acción de 4,18 dólares, frente a los 2,79 dólares por título del trimestre finalizado en septiembre de 2022. El dato se ha situado por encima de los 3,31 dólares por acción previstos por el consenso.

En cambio, los ingresos de la compañía no han superado las expectativas del mercado al situarse en 1.027,3 millones de dólares, un 7,1% menos que los 1.068,6 millones de dólares del tercer trimestre del año previo, e inferior a los 1.050 millones de dólares esperados.

Asimismo, las ventas comparables de Domino’s Pizza en Estados Unidos han caído un 0,6%, cuando los analistas confiaban en que se mantuvieran estables.

La compañía cerró el tercer trimestre del ejercicio fiscal con 20.197 tiendas, lo que supone ocho locales menos en el tercer trimestre. El 99% de estos establecimientos son propiedad de los franquiciados.

«Seguimos ejecutando nuestras iniciativas para impulsar el crecimiento sostenible en EEUU«, ha señalado Russell Weiner, consejero delegado de Domino’s.

«Nuestra iniciativa ‘Verano de Servicio’ y el arduo trabajo de nuestros franquiciados y miembros del equipo han devuelto los tiempos de entrega a niveles previos a la pandemia. Domino’s Rewards está atrayendo a más clientes y nuestra integración con el mercado de Uber va por buen camino. Estamos listos y emocionados de entregar los pedidos incrementales que ambos programas traerán en 2024 y más allá«, ha añadido.

De cara al resto del año, la cadena espera que el crecimiento neto global de sus tiendas tenga una tendencia en o ligeramente por debajo del extremo inferior de su plan de dos años del 5% al 7% a tres años de perspectiva. Además, prevé que el crecimiento de sus ventas minoristas globales en 2023, excluyendo el impacto del tipo de cambio, tenga una tendencia modestamente por debajo del punto medio de su perspectiva de dos a tres años del 4% al 8%.