El vicepresidente económico del FC Barcelona, Eduard Romeu, explica gráficamente a Mundo Deportivo las cuentas que se presentarán a la Asamblea.
¿Puede hacer un repaso rápido de la liquidación 22-23?
Vamos a comparar lo que dijimos en el presupuesto con lo que se ha liquidado. Dijimos que habría ingresos de 1.255 millones y hemos obtenido 1.259. 4 más. Ha habido una parte negativa en ingresos de TV, por las eliminaciones prematuras en Champions y Europa League, compensada en buena parte por los incrementos en Estadio y la parte comercial. El impacto de las eliminaciones en Europa al final ha sido de 25 millones de euros. También ha habido menos ingresos por traspasos de los previstos, por ejemplo, 20 millones de diferencia por Griezmann.
¿Y en gastos?
Habíamos presupuestado 1.065 millones y obtenemos 1.165. Gastamos 100 más. Después vienen los impuestos de sociedades y el tema meramente financiero. ¿Por qué hay 100 millones más de gastos?, se han incrementado 20 millones de euros en salarios deportivos, respecto a lo presupuestado; los salarios no deportivos en 3 millones de euros; gastos de gestión 11 millones de euros; y hay otros gastos, vinculados a más ingresos, como los gastos de producción. Adicionalmente, hemos provisionado 100 millones de euros en este ejercicio, ya que habíamos tenido 208 millones por la participación en Bridgeburg (Barça Vision). Es una contrapalanca, gastos de futuro fruto que podíamos tener fruto de las mochilas del pasado. Por ejemplo, Alba, Umtiti, Mirotic u otros jugadores.
Piqué ha perdonado, ¿no?
Piqué es un caso aparte. Lo importante es que cargamos este importe (al ejercicio 22-23) y nos liberamos de mochilas futuras.
Vamos al presupuesto 23-24
Toma forma el plan de viabilidad, que me encargó el presidente y los ejecutivos han ejecutado. Presentamos ingresos de 859 millones, ingresos ordinarios de actividad del club. Comportan una rebaja de 78 millones de euros en el estadio, por la subida a Montjuïc; 28 millones más de Media, porque estamos convencidos de que llegaremos a estos niveles de Champio0ns; a nivel comercial, 27 millones respecto al ejercicio anterior, que ya tuvo un incremento importante. Es un objetivo ambicioso, pero tenemos muchas firmas de acuerdos y contratos. Y hay 377 millones menos que en la temporada anterior porque no hay palancas.
¿Y gasto?
Apuntamos a 832 millones. La gran rebaja está en salarios deportivos, lo reducimos en 184 millones, con una labor muy sorda.
¿Es donde más energía han dedicado?
Sí, es la partida más relevante del club. Los salarios no deportivos también se reducen en 2 millones; los gastos de gestión bajan 50 millones; y los otros gastos bajan 98. Deducido del resultado financiero y con un impuesto de sociedades mucho más pequeño porque el beneficio es inferior, apunta a un resultado positivo. No es tan relevante la cifra que podamos presentar como mejorar el presupuesto que presentamos. Es ambicioso, pero sentamos las bases para ratificar el plan de viabilidad.
¿En qué año se contemplaba el equilibrio presupuestario?
Pedimos cuatro años de paciencia para poder revertir la situación del club a nivel de cuenta de resultados.
¿Y la deuda?
También me siento orgulloso de haberla rebajado. Era una losa, tanto en el criterio que establece LaLiga como en nuestro criterio, más riguroso. De 1.350 estamos en torno a 1.200, con lo cual se ha hecho una buena labor. Con el criterio de LaLiga es el segundo año que reducimos deuda. En cualquier caso, pedimos cuatro años de paciencia al socio, diciéndole que intentaríamos ser competitivos deportivamente al segundo año, porque hay que combinarlo. En el segundo año ya conseguimos ganar un título como la Liga.
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