Rafa Nadal se vio obligado este miércoles a corregir en las redes sociales, en un tono amable, al director del Abierto de Australia, Craig Tiley, que había anunciado unas horas antes el regreso del manacorí a las pistas en Melbourne el próximo 14 de enero. «Agradezco el voto de confianza del Abierto de Australia… estoy practicando todos los días y trabajando duro para volver lo antes posible», publicó por la tarde.
La notificación del dirigente oceánico había causado furor a nivel mundial porque suponía la vuelta a la competición del mallorquín después de haber sido operado en junio en la cadera. «Podemos revelar en exclusiva que Rafa volverá. Ha estado fuera (de las pistas) la mayor parte del año y, al hablar con él los últimos días, confirmó que regresará (al Abierto de Australia), lo cual nos entusiasma mucho. Es increíble», declaró en el programa «Today» del Canal 9 de la televisión australiana.
El director subrayó que Nadal, quien previamente anunció que la siguiente puede ser su última temporada en el tenis, «se presentará para ganar», al igual que hizo en 2009 y 2022. El próximo Abierto de Australia comenzará un domingo, el 14 de enero, y se prolongará durante quince días, uno más que en ediciones anteriores, para evitar a los jugadores la carga de partidos y los horarios excesivos. Un cambio que el propio torneo considera «histórico».
Sin embargo, fuentes cercanas al tenista consultadas por Diario de Mallorca ya informaron al mediodía que su presencia no estaba confirmada, «ni mucho menos», tal y como publicó este periódico en su edición digital. No obstante, el balear quiso salir al paso horas después para zanjar en público todas las especulaciones.
Nadal, de 37 años, jugó su último partido oficial el pasado 18 de enero, cuando cayó en segunda ronda del Abierto de Australia por 6-4, 6-4 y 7-5 ante el estadounidense Mackenzie McDonald. Hace una semana se pudo ver a Nadal entrenando en la Academia de Manacor en un vídeo que difundió a través de su cuenta en la red social Instagram. En este puede verse al multicampeón devolviendo pelotas de derecha y de revés desde el fondo de la pista como parte de un entrenamiento pensando en su vuelta a la competición. La gran intensidad del trabajo evidenció que su recuperación está cerca.