La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, iniciará este sábado un nuevo viaje institucional a Nueva York, el tercero en dos años, con el supuesto objetivo de «potenciar» la marca Madrid como destino turístico y económico. Sin embargo, su agenda parece más enfocada en promocionar su propia imagen y la de sus aliados políticos que en defender los intereses de los madrileños.
Según ha informado el Gobierno regional, Ayuso desarrollará una intensa agenda de cuatro días, del sábado 14 al martes 17 de octubre, en la que participará en varios actos económicos, culturales y mediáticos. Entre ellos, destacan un desayuno informativo organizado por la Cámara de Comercio Spain-US Chamber of Commerce junto con Invest in Madrid, y la II Gala del Teatro Real en Manhattan, que tendrá lugar en el Lincoln Center.
Sin embargo, lo que no ha trascendido es el coste que supone este viaje para las arcas públicas, ni los resultados concretos que se esperan obtener del mismo. Tampoco se ha explicado por qué Ayuso ha elegido repetir destino por tercera vez en dos años, cuando existen otros mercados potenciales para la Comunidad de Madrid, como Europa o Asia.
Cabe recordar que Ayuso ya viajó a Estados Unidos en septiembre de 2021 y en junio de 2023, visitando las ciudades de Nueva York y Washington en la primera ocasión, y Miami en la segunda. En ambos casos, la presidenta aprovechó para reunirse con personalidades afines a su ideología, como el exalcalde neoyorquino Rudy Giuliani o el gobernador floridano Ron DeSantis, ambos del Partido Republicano y cercanos al expresidente Donald Trump.
Además, Ayuso no dudó en hacer declaraciones polémicas y controvertidas durante sus viajes, como cuando criticó al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, por su gestión de la pandemia o cuando defendió el uso de armas por parte de los ciudadanos. Estas intervenciones le valieron el aplauso de los sectores más conservadores y ultraderechistas, pero también el rechazo y la indignación de muchos madrileños y españoles.
Así pues, cabe preguntarse si este nuevo viaje de Ayuso a Nueva York responde realmente a una estrategia para potenciar la marca Madrid o si se trata más bien de una excusa para seguir haciendo campaña electoral y buscando apoyos internacionales para su proyecto político. Mientras tanto, los problemas de la Comunidad de Madrid siguen sin resolverse: la falta de personal sanitario y educativo, el aumento de la pobreza y la exclusión social, la precariedad laboral y la desigualdad territorial.
Por todo ello, desde la oposición se ha criticado duramente este viaje y se ha exigido a Ayuso que rinda cuentas ante la Asamblea de Madrid. También se le ha pedido que se centre más en gobernar para todos los madrileños y menos en viajar por el mundo para hacerse fotos y dar titulares