El estadounidense anotó el único tanto del partido en un final caótico que terminó con los dos porteros expulsados en el añadido
Giroud se disfrazó de héroe salvando a su equipo bajo palos en la última jugada del partido
El estadounidense Christian Pulisic desbloqueó este sábado el igualado duelo ante el Genoa con un tanto en los minutos finales de un partido que se volvió loco con las expulsiones de Maignan y Josep Martínez, sendos porteros, pero que acabó alzando al Milan a lo más alto de la tabla de la Serie A tras el tropiezo del Inter ante el Bolonia.
Fueron 14 minutos de tiempo añadido y tanto el Genoa como el Milan acabaron con un jugador como portero en los minutos finales. Un caótico final que desembocó en un nuevo líder de la Serie A italiana. El Milan consiguió sobre la bocina los tres puntos ante el matagigantes de la máxima competición italiana, que ya ganó a la Lazio, empató con el Nápoles y goleó a la Roma, siendo este su primer partido en el que no obtiene premio ante uno de los grandes.
Lo rozó el combinado que dirige el italiano Alberto Gilardino, pero el tanto con suspense de Pulisic en el minuto 87, revisado por el VAR durante varios minutos por una posible mano del estadounidense en su control, arruinó a los locales y dio respiro a los visitantes, que dormirán como primeros durante el parón de selecciones.
Y es que la ‘Unidad B’ con la que saltó Stefano Pioli en el Luigi Ferraris de Génova no dio resultado. Ni Jovic, ni Okafor, ni Chukwueze fueron capaces de desarbolar el gran entramado defensivo genovés durante la primera parte, lo que obligó al técnico a mover el banquillo en el descanso y dar entrada a Leao y Pulisic en los puestos de Okafor y Chukwueze.
Mejoró el Milan con dos hombres titulares sobre el campo, el ataque del combinado ‘rossonero’ fue más tenaz, más agresivo y más continuo, pero sin acabar de ser claro. Entró Giroud para cargar más el área y empezaron los centros laterales, desde los que llegó la ocasión más clara minalista en un remate picado de Leao que desbarató el español Josep Martínez bajo palos.
El partido se dirigía inevitablemente al empate cuando todo dio un vuelco. En el 87′ Pulisic, con una media vuelta fundamenta, se hizo hueco para superar al meta español del Genoa y encarriló lo que parecía una victoria segura.
Pero lejos de amedrentarse, el Genoa quiso luchar por una victoria que rozó. Porque en una salida pasada de revoluciones, Maignan atropelló a Ekuban y el VAR llamó al colegiado para revisar la acción. Expulsado el meta galo, fue Giroud el que ocupó su puesto bajo palos y el que vio cómo el lanzamiento de Gudmundsson de la falta provocada por su compañero expulsado se estrelló en el larguero después de que la barrera desviara el disparo.
Subió entonces Josep Martínez, meta español del Genoa, a rematar el saque de esquina y tras una dura entrada para eviatar la contra del Milan acabó recibiendo su segunda amarilla y, por tanto, la cartulina roja. El partido mantuvo el ritmo frenético pese a las dos expulsiones y, en la última jugada, el Genoa volvió a rozar un gol que le arrebató una gran intervención de Giroud, valiente en la salida con guantes, portando la camiseta de Maignan y asegurando el liderato del Milan en un partido loco en el que el gol del ‘Capitán América’ Pulisic impuso cordura.
