«Salid a explicar a todo el mundo lo que la Copa América de vela puede hacer por Barcelona«, ha proclamado el máximo responsable de la 37 edición del evento deportivo y tecnológico que se celebrará en la capital catalana a partir de agosto del 2024, Gran Dalton. El neozelandés, instalado en la ciudad hace un año y enamorado de su elección, siempre contagia optimismo sobre lo que está por venir y, con más de 300 personas en la sala del antiguo Imax escuchándole, les ha invitado a difundir lo que se explica en el America’s Cup Experience.
El centro de interpretación de la Copa América, el primero de este tipo que se hace en la historia de la legendaria cita, está abierto en el Port Vell desde finales de agosto, pero aún le faltaba la puesta de largo con las instituciones. Con el Salón Náutico a la vuelta de la esquina y los operarios construyendo los estands a escasos metros, los impulsores de la iniciativa, una concesión del Puerto de Barcelona, han organizado este jueves una inauguración institucional en la que se comprobó nuevamente la sintonía entre administraciones y también con los privados.
‘Una batalla al límite’
Dalton ha recordado que la primera vez que vio en qué estado estaba el edificio temió que no acabaran a tiempo. «Nos dijo que era mejor que lo derribáramos del todo«, añadía sonriendo uno de los promotores de la iniciativa, Jaume Sabater. Pero decidieron mantener la sala de proyecciones donde los invitados contemplaron en la enorme pantalla el documental de ocho minutos, ‘Una batalla al límite’, que da voz a los seis equipos que compiten y en los que se comprueba la enorme rivalidad entre los atletas y la épica que envuelve el acontecimiento mundial.
Las administraciones catalanas y españolas son conscientes del potencial de la Copa América de vela. Aunque las ediciones de València quedan muy lejos, la realidad televisiva confirma esa confianza en el escaparate que supondrá para Barcelona, como insiste Dalton, también director ejecutivo de America’s Cup Events (ACE).
«Quiero que no se vaya»
«La primera vez que me dijeron que Barcelona aspiraba a acogerla tuve dudas de si podría venir, pero ahora lo que quiero es que no se vaya«, ha confesado el presidente del Consejo Superior de Deportes, Víctor Francos. «En primer lugar que sea un éxito y nos dé el prestigio necesario», ha descrito para a continuación subrayar que «cuando lo público y lo privado van de la mano es un éxito».
Antes que él ha intervenido la directora general de Turisme de la Generalitat, Marta Domènech, que ha explicado que la competición de vela ayudará a tener más presencia de Catalunya en mercados como el americano pero también el alemán. «Nos posiciona y consolida en el turismo náutico que es un público que tiene un gasto elevado. Además, el legado que deje nos consolidará, promoviendo valores como la innovación«, ha pronosticado.
Romper el tabú elitista
En el ámbito local, el concejal de Deportes de Barcelona, David Escudé, ha añadido también que el ayuntamiento impulsará actividades náuticas entre los más pequeños para incentivar la práctica de este deporte y ha zanjado: «Romperemos el tabú de vela y deporte elitista«.
De hecho, una de las iniciativas que promoverán los responsables del America’s Cup Experience serán las visitas escolares del centro, donde en los próximos días deben llegar las joyas de la corona, los dos simuladores de embarcaciones de Copa América en los que, gracias a unas gafas virtuales, se podrá experimentar la navegación a bordo de estos Fórmula 1 del mar.
Aceleración de inversiones
«Estamos muy orgullosos de lo que habéis hecho con este espacio icónico», les ha felicitado el presidente del Port de Barcelona, Lluís Salvadó, que ha aprovechado para destacar cómo la competición ha acelerado una serie de inversiones previstas en el Port Vell que ya ascienden a 20 proyectos y 120 millones de euros.
