Jürgen Klopp dio descanso a varios jugadores pero el Liverpool consolidó su liderato en el grupo E de la Europa League al limitarse a cumplir el expediente con triunfo por 2-0 sobre el Union Saint-Gilloise belga. Los ‘reds’ suman 6 puntos en dos partidos y le sigue el Toulouse, con 4, tras ganar por 1-0 al LASK LInz, colista con 0 puntos. El Saint-Gilloise suma uno.
Más allá del resultado, ya que todo el mundo daba por hecho que ganaría el Liverpool, el interés del partido estaba puesto en el particular duelo argentino entre los hermanos MacAllister. Kevin, central del Saint-Gilloise de 25 años, fue titular y jugó 67 minutos. Alexis, de 24, disputó toda la segunda parte, por lo que coincidieron 22 minutos en el campo. Todo ello en presencia de la familia, encabezada por el padre y ex futbolista Carlos, en las gradas en Anfield.
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Al final se impuso la lógica, Alexis ganó a Kevin, aunque la diferencia de categoría entre ambos equipos solo se tradujo en el marcador en el primer gol con la camiseta ‘red’ de Ryan Gravenberch.
El medio neeerlandés, incorporado este verano del Bayern Múnich, fue una de las novedades en el once de Klopp, que dio descanso a titulares como Van Dijk, Robertson y Szoboszlai, mientras MacAllister, Curtis Jones y Luis Díaz entraron en la segunda parte.
El meta Moris se luce
Pese a las rotaciones, como era de prever, el Liverpool salió volcado y prácticamente desde el pitido inicial el portero Anthony Moris se erigió en protagonistas con sus paradas.
El meta belga, internacional con Luxemburgo, ya evitó en el minuto 4 el gol de Mohamd Salah, que se plantó solo tras un rebote. Poco después Moris rechazó un trallazo de Gravenberch y Darwin Núñez marcó pero en fuera de juego (9′).
Darwin falla un gol cantado
El uruguayo falló un gol cantado, en el 17′, al rematar fuera, solo, un balón de oro que le puso Salah (17′). Fue la última ocasión clara del Liverpool en un primer cuarto de hora que el Saint-Gilloise aguantó como pudo antes de asentarse en el terreno de juego y controlar mejor las embestidas del rival.
Incluso los belgas se atrevieron a rematar a puerta y dispusieron de una buena ocasión en un lanzamiento de falta de Cameron Puertas que Gustaf Nilsson cabeceó alto por poco (26′).
Gravenberch se estrena gracias a Moris
El partido se encaminaba al descanso y, cuando menos lo merecía, el Liverpool se avanzó en el marcador en un error de Moris. Como a veces suele suceder, el portero empañó su gran actuación al rechazar en corto un disparo de Trent Alexander-Arnold, que reapareció después de su lesión, y Gravenberch, atento, marcó a placer (44′).
Salah y Darwin se quedan en la caseta
En el descanso Klopp dejó en la caseta a Salah por Curtis Jones y a Darwin Núñez por Luis Díaz, que pasó a jugar por la izquierda del ataque, Diogo Jota pasó a jugar de ‘9’ y Harvey Elliott por la derecha.
Moris siguió manteniendo vivo en el partido a su equipo al lucirse en un cabezazo de Diogo Jota y un chut de Gravenberch antes de ser sustituido. El partido no estaba cerrado y el Saint-Gilloise lo aprovechó para prodigar varios acercamientos con cierto peligro a la portería de Alisson pero sin concretarlos en gol.
Diogo Jota sentencia en el descuento
Solo en el descuento la afición ‘red’ pudo respirar tranquila cuando Diogo Jota culminó una contra cruzando ante Moris y sentenció el discreto triunfo del Liverpool.
