Dos hombres acusados de tráfico de drogas en el Valle de Jinámar han admitido ser los autores de un delito contra la salud pública, por el que pasaron a disposición judicial en junio de 2021. Las partes han llegado a un acuerdo por el que el proveedor de sustancias estupefacientes deberá pagar una multa de 300.000 euros e ingresará en prisión durante tres años y 11 meses, mientras que el encargado de su venta pagará 300 euros de multa y cumplirá tres años y dos meses de cárcel. No obstante, las defensas han avanzado que aportarán los informes que avalan que ambos procesados se encuentran en tratamientos de desintoxicación para evitar su entrada en un centro penitenciario.
La Fiscalía Provincial de Las Palmas solicitaba inicialmente una pena de seis años de prisión para Echedey H. C., que custodiaba la droga en su propia vivienda, y de cuatro años y once meses para Rubén D. G., el cual se encargaba de atender a los clientes. En el juicio que tuvo lugar este martes ante la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, el fiscal avanzó su «buena disposición» frente a la propuesta de la defensa del proveedor de suspender la entrada en la cárcel «al comprobar que el acusado respetaba hasta febrero de 2023 el tratamiento«, aunque solicita que se aporte un documento actualizado que acredite su evolución. Por su parte, el abogado del procesado por vender las sustancias aseguró que ya ha solicitado y está a la espera de que se emita el informe de su cliente para adjuntarlo a la causa.
Los autores de los hechos permanecieron en prisión provisional por este motivo desde el 2 de julio hasta el 24 de septiembre de 2021, después de que les fueran incautadas sustancias por un valor en el mercado de 121.030 euros. La acusación pública recoge que el 14 de junio de ese mismo año, a las 8.15 horas, entregaron a un cliente 0,04 gramos de heroína, en la urbanización donde custodiaban la mercancía. Al día siguiente, a las 10.30 horas, les interceptaron la venta de 0,13 gramos de heroína y, con pocos días de diferencia, Rubén vendió a distintos clientes 0,11 gramos de morfina, 0,02 gramos de cocaína y 0,05 gramos de cocaína.
El hombre que guardaba la mercancía en su domicilio deberá pagar 300.000 euros
Ante estos indicios, las autoridades policiales accedieron el 29 de junio al domicilio de Echedey, en torno al cual se habían llevado a cabo las transacciones, para llevar a cabo un registro. Allí lo detuvieron tras encontrar 17,7 kilos de resina de cannabis, 186 gramos de cocaína y 3,35 gramos de cannabis, además de 6.345 euros en efectivo proveniente de las actividades delictivas.
En esta operación también incautaron una serie de objetos y vehículos adquiridos con las ganancias provenientes del tráfico de drogas. Entre ellos se hallaban bolsas de plástico con cierre hermético, una báscula de precisión, un sable samurái y un televisor de 55 pulgadas, junto a dos coches.
Objetos incautados
Pocas horas más tarde se procedió a la detención de Rubén a la puerta de su domicilio, pues en su interior guardaba 0,88 gramos de heroína y una báscula de precisión. La Fiscalía sostiene que esta sustancia iba a ser destinada a su venta en el mercado.
Ambos habían sido procesados con anterioridad por otros delitos contra la salud pública. En concreto, E. H. C. fue condenado a un año y seis meses de cárcel en 2011, una pena que quedó extinguida en 2014. Mientras tanto, R. D. G. cumplió una pena de tres años de prisión por otro caso similar en mayo de 2005.