La Comisión Europea ha advertido este martes de la especial vulnerabilidad de la Unión Europea en cuatro áreas tecnológicas críticas como son los semiconductores avanzados, la inteligencia artificial, la tecnología cuántica y las biotecnologías, e insta a los gobiernos comunitarios a realizar evaluaciones de riesgos para establecer «un enfoque estratégico integral para la seguridad económica en la Unión».

En su recomendación, la Comisión presenta una lista de diez áreas tecnológicas,que fueron seleccionadas con base en los siguientes criterios: naturaleza habilitadora y transformadora de la tecnología; riesgo de fusión civil y militar; riesgo de que la tecnología pueda usarse en violación de los derechos humanos.

De las diez áreas tecnológicas críticas, Bruselas identifica a cuatro de ellas, al considerarlas altamente probables de presentar los riesgos más sensibles e inmediatos relacionados con la seguridad y la fuga de tecnología.

En este sentido, pone en el foco a la inteligencia artificial, la biotecnología, los semiconductores y la computación cuántica y pide que «los Estados miembros, junto con la Comisión, realicen inicialmente evaluaciones de riesgos colectivas de estas cuatro áreas antes de finales de este año. La recomendación incluye algunos principios rectores para estructurar las evaluaciones colectivas de riesgos, incluida la consulta al sector privado y la protección de la confidencialidad«.

La vicepresidenta de la Comisión Europea responsable de Estado de derecho, Vera Jourova, ha afirmado que «actualmente, la tecnología está en el centro de la competencia geopolítica y la UE quiere ser un actor y no un patio de recreo. Y para ser un actor, necesitamos una posición unida de la UE, basada en una evaluación común de los riesgos. Con este enfoque seguiremos siendo un socio global abierto y predecible, pero que nutre su ventaja tecnológica y aborda sus dependencias. Como resultado de ello, nuestro mercado único no hará más que fortalecerse en todas sus partes«.

El comisario de Mercado Interior, Thierry Breton, por su parte, ha señalado que «estamos cumpliendo nuestra promesa de reducir los riesgos de la economía europea identificando diez áreas de tecnologías que son críticas para nuestra seguridad económica, especialmente debido al riesgo de fusión civil-militar. Este es un paso importante para nuestra resiliencia. Necesitamos monitorear continuamente nuestras tecnologías críticas, evaluar nuestra exposición al riesgo y, cuando sea necesario, tomar medidas para preservar nuestros intereses estratégicos y nuestra seguridad. Europa se está adaptando a las nuevas realidades geopolíticas, poniendo fin a la era de la ingenuidad y actuando como una verdadera potencia geopolítica».

La Comisión colaborará con los Estados miembros, a través de los foros de expertos adecuados, para iniciar evaluaciones colectivas de riesgos para las cuatro áreas tecnológicas definidas como «críticas».

Además, entablará un diálogo abierto con los Estados miembros sobre el calendario y el alcance adecuados de nuevas evaluaciones de riesgos, teniendo en cuenta, entre otras cosas, la contribución del factor tiempo a la evolución de los riesgos.

La Comisión también podrá presentar nuevas iniciativas a este respecto antes de la primavera de 2024, a la luz de dicho diálogo y de la primera experiencia con las evaluaciones colectivas iniciales de riesgos, así como de nuevas aportaciones que puedan recibirse en las áreas tecnológicas enumeradas.