Sin Jon Rahm en los fourballs de la sesión de tarde, una decisión que tuvo sus pros y sus contras (por descanso parece ser), el equipo europeo sufrió lo suyo y al final la lucha, tremenda, no tuvo toda la recompensa que merecía. Podía sacar dos puntos de oro pero un Patrick Cantlay inconmensurable le dio la vuelta al último partido y con tres birdies increíbles en el 16, 17 y 18 EE.UU. logró colocar el parcial de 3-1 a su favor y dejar el marcador con una ventaja para Europa de 5 puntos (10,5-5,5) a falta de los 12 partidos individuales de este domingo. Ningún equipo que ha ido cinco por detrás el último día ha ganado la Ryder. Habrá, eso sí, algo más de emoción.

Europa por tanto necesita cuatro puntos para reconquistar el trofeo tras el varapalo de hace dos años (19-9). Mención destacada merece en esta nueva tarde de Ryder total, épica, Justin Rose. Hasta el hoyo 18 también Rory McIlroy, pero Cantlay fastidió la fiesta europea con su espectacular final. Ausente Rahm, los británicos fueron los auténticos animadores del equipo de Donald, cargando con todo el peso del mismo.

Perdidos los dos primeros duelos, el de Viktor Hovland y Ludvig Aberg, siempre a remolque de Collin Morikawa y un desafiante Sam Burns, y el de Tommy Fleetwood y Nicolai Hojgaard, ante un Max Homa que aguantó al equipo USA y es ahora mismo el máximo baluarte estadounidense y Brian Harman, Europa lo fió todo a los duelos encabezados por los dos totems. Justin Rose junto a Robert MacIntyre y Rory McIlroy con Matt Fitzpatrick, vaya cuatro este sábado. Ellos lo sabían y jugaron acorde a la responsabilidad del momento. A lo que les había encomendado el capitán Donald.

Mucho mérito tiene la actuación del veterano Rose, de 43 años, en su sexta Ryder, metiendo una media docena de putts buenísimos que le dieron a la pareja una ventaja de 3 hoyos a falta de 4. Cómo cuidó, mimó, y animó Rose al joven zurdo escocés es de traca. MacIntyre aseguró como mínimo el medio punto en el hoyo 15. Jordan Spieth siguió perdido y casi nulo mientras Justin Thomas poco más pudo hacer. Rose cerró en el hoyo 16 con el enésimo putt decisivo de birdie la victoria europea. Hats off. Just in Time.


Menudo final de Cantlay, con tres birdies que le dieron la vuelta a su partido ganando un punto increíble

Alessandra Tarantino / LaPresse

Por detrás, un McIlroy que volvió a dar el callo en los momentos que Europa lo necesitaba (vaya gesto de rabia y euforia tras un gran putt de birdie en el hoyo 14, y el golpazo de salida en el 16), y un Fitzpatrick que apareció cuando debía, libraron una batalla durísima contra Patrick Cantlay y Wyndham Clark. En el tee del hoyo 16 Europa mandaba por un hoyo. McIlroy tuvo opción de eagle pero Cantlay sacó un gran birdie y se fueron al 17. Ahí el estadounidense pegó un gran tiro a dos metros y no falló el putt. Empatados llegaron al 18, con Cantlay, McIlroy y Fitzpatrick en green pero lejos de bandera para el ‘4’. Jugó primero Cantlay y de nuevo putt a la cazuela. Jugaron los europeos y sus bolas no quisieron saber nada del hoyo. A pesar de este pequeño revés y del parcial de 3-1 para EE.UU., Europa sigue siendo la gran favorita con esos cinco puntos de ventaja.

Resultados fourballs (Europa-USA, 1-3, total: 10,5- 5,5):

Viktor Hovland-Ludvig Aberg (Eur) pierden con Sam Burns-Collin Morikawa (USA), 4 y 3

Tommy Fleetwood-Nicolai Hojgaard (Eur) con Max Homa-Brian Harman (USA), 2 y 1

Justin Rose-Robert MacIntyre (Eur) ganan a Justin Thomas-Jordan Spieth (USA), 3 y 2

Matt Fitzpatrick-Rory McIlroy (Eur) pierden con Patrick Cantlay-Wyndham Clark (USA), un hoyo