Un hoja de ruta que plantea un crecimiento rápido, pero sostenido en el tiempo, con cifras prudentes, pero, al mismo tiempo, ambiciosas, y en el que las prácticas socialmente responsables marquen el día a día de la compañía. Así se podría definir el plan estratégico de Coxabengoa, firma presidida por el alicantino Enrique Riquelme y que nace de la fusión de Grupo Cox y Abengoa. Una compañía que se ha marcado el objetivo de superar los 3.000 millones de euros en facturación en 2027 y que aspira a tener más presencia en la Comunidad Valenciana y, en especial, en la comarca de Enrique Riquelme, en la Vega Baja.
E l grupo se estructura en esta nueva etapa en cinco verticales o divisiones muy bien definidas. Por un lado, está Coxabengoa Energy, dedicada a la ingeniería, la adquisición y la construcción (EPC) de activos energéticos, la generación de electricidad y la comercialización. Por otra parte, está Coxabengoa Water, encargada de la construcción de infraestructuras hidráulicas y especializada en la construcción de desaladoras, como la que está considerada la más grande de África: la de Agadir, en Marruecos. En tercer lugar, está Coxabengoa Infra, que es la división de infraestructuras y, en particular, de líneas de transmisión y subestaciones, origen de la ingeniería sevillana cuando nació en 1941. Coxabengoa Services, con la operación y el mantenimiento de infraestructuras propias y de terceros, y Coxabengoa Tech, enfocada a la innovación y con 255 patentes, completan el grupo, integrado por 11.200 empleados, 1.700 de ellos contratados en los últimos meses, tras la adquisición de Abengoa por parte de Cox.
Por lo que respecta a las cifras del plan estratégico, se prevé pasar de los 736 millones de euros de facturación y los 109 de ebitda con los que inicialmente se prevé cerrar este ejercicio a 1.203 millones de ingresos y 175 de ebitda el próximo año; 2.101 millones de revenues y 368 de ebitda en 2025; 2.685 millones y 533 millones en 2026; hasta llegar a 2027, cuando se aspira a llegar a 3.020 millones de ingresos y 609 millones de ebitda, triplicando así lo proyectado para 2024. El peso, en este sentido, va a estar, lógicamente, en la división de energía, que, de hecho, es el origen de Grupo Cox y de Cox Energy, pero también en agua y en infraestructuras.
Ahora bien, Coxabengoa no sólo quiere continuar creciendo en cifras. También quiere tener más implantación en la Comunidad Valenciana y, sobre todo, en la Vega Baja. Al respecto, el presidente ejecutivo de la compañía, Enrique Riquelme, desde el principio ha venido dejando claro que «nuestro compromiso con Sevilla es total, y la sede de Abengoa va a seguir estando en Sevilla, mientras Cox la tiene en Madrid». No obstante, subraya que «no hay que pensar tanto en Sevilla, Madrid o Alicante. Las sedes no son importantes, lo importante es donde están los profesionales. No me siento con el derecho a cambiar la vida a 2.000 personas que están en Sevilla, y seguiremos creando empleo allí, igual que la gente que está en Madrid seguirá en Madrid».
Eso no quita para que apostille que, «a nivel personal, y porque soy de la Comunidad Valenciana, el objetivo también es invertir y seguir creando empleo en la Comunidad Valenciana». Enrique Riquelme, en esta línea, señala que «este nuevo Gobierno nos ha tratado de manera muy transparente y vamos a seguir invirtiendo y creando riqueza en esta autonomía y, sobre todo, en la comarca de la Vega Baja, donde queremos industrializar parte de las fábricas en la zona». El propósito del empresario nacido en el municipio de Cox es «seguir desarrollando delegaciones para enfocar nuestro crecimiento con algunas verticales de Abengoa en la Comunidad Valenciana y Murcia, y ver cómo crecemos en agua y desalación, y, sobre todo, en creación de empleo, talento y formación».
Para lograr sus propósitos, Coxabengoa tendrá como CEO a Ignacio Moreno, con una larga experiencia en el sector financiero. Procedente de Credit Suisse, ha desarrollado buena parte de su carrera en Barclays.
Con implantación en más de 30 países de todo el mundo
La fusión de Abengoa y Cox Energy permitirá que el nuevo grupo, Coxabengoa, tenga presencia en más de 30 países de todo el mundo. El foco está puesto ahora en entrar en nuevos mercados y seguir trabajando en los que ya operan, con especial atención en Estados Unidos. La lista de las zonas en las que está la firma es bien extensa. En particular, en América Latina, donde ya trabajan en México, parte del Caribe y Centroamérica, Colombia, Chile, Argentina o Brasil, por ejemplo. En Europa, tienen presencia en Portugal, España, Italia, Francia y el Reino Unido. Incluso en Ucrania tienen en estos momentos a personal terminando una línea de transmisión. Coxabengoa también está en Argelia, Marruecos, Sudáfrica, Kenia, Egipto, y todo Medio Oriente completo. De hecho, en África, además de la desaladora de Agadir, también tienen otra en Ghana. La intención es seguir invirtiendo en agua, y, en particular, convertirse en un player clave en el mercado español con la división Coxabengoa Water. «Es el momento de entrar en agua y queremos aportar el conocimiento de ser el mayor grupo en desalación global con tecnología propia», comenta Enrique Riquelme.