Padre e hijo coinciden en Galicia, pero rehúyen del encuentro frente a frente. La agenda oficial del rey Felipe VI le ha conducido este jueves a la localidad de La Toja, para asistir a un foto; mientras, Juan Carlos I se encuentra en Sanxenxo, donde está participando en las regatas. Ambas localidades están a una distancia de 15 kilómetros, pero no se ha dado reunión alguna entre ambos.
El rey emérito sembró ciertas expectativas este jueves de que pudiera tener lugar un encuentro entre padre e hijo, dada su proximidad a tan solo unos minutos en coche, al señalar este mediodía que «seguramente» se vería con el Rey tras ser preguntado por los periodistas que han estado siguiendo todos sus movimientos.
Pese a que no ha podido ser hoy, sí que ambos tienen marcada la fecha del 31 de octubre en rojo en el calendario, ya que se celebrará una reunión familiar privada en El Palacio de El Pardo, en señal de festejo por la jura de la Constitución de la Princesa Leonor, coincidiendo así con su 18 cumpleaños y cuando la heredera al trono se encuentra inmersa en su formación militar en Zaragoza.
Según informó Zarzuela, Juan Carlos I no está invitado a los actos institucionales que tendrán lugar en el Congreso, donde la princesa de Asturias jurará la Carta Magna ante las Cortes, y en el Palacio Real, donde recibirá el Collar de la Orden de Carlos III y tendrá lugar un almuerzo con la presencia de las principales autoridades del Estado. Tras ello, tendrá lugar en El Pardo una celebración familiar y privada a la que han sido invitadas tanto la familia del rey -incluyendo a los reyes eméritos, las infantas Elena y Cristina y, previsiblemente, sus hijos-, como la de la reina Letizia.
El emérito recibe a su hermana, la infanta Margarita
Aunque no ha podido verse con su hijo, el rey emérito sí que ha recibido este jueves una visita muy especial, la de su hermana, la infanta Margarita, junto con los hijos de esta, Alfonso y María Zurita, esta última acompañada a su vez de su hijo Carlos.
Como estaba previsto, el emérito ha salido a navegar a bordo de ‘El Bribón’ por la ría de Pontevedra junto a sus familiares. Posteriormente, a su llegada al Real Club Náutico de Sanxenxo, donde ha almorzado con su hermana y sus sobrinos, el emérito ha reconocido estar «muy contento» por su visita.
El que fuera monarca durante casi cuatro décadas permanecerá aún algunos días más en Sanxenxo, ya que tiene previsto participar este fin de semana en la octava regata rey Juan Carlos I que reunirá a más de 160 barcos.
El rey, en el Foro de La Toja
A menos de 20 kilómetros de distancia, el jefe del Estado ha participado en la inauguración del V Foro La Toja, tras lo cual ha regresado a Madrid, conforme a lo previsto en su agenda oficial, según han confirmado fuentes de Zarzuela.
En su intervención, ha repasado algunos de los retos que se debatirán este fin de semana en el foro, como la globalización, la Inteligencia Artificial, la nueva geopolítica mundial y el papel de España en el mundo. Todo esto, ha defendido, debe afrontarse desde el optimismo, y no desde el pesimismo «en el que muchos insisten». «Un mundo en el que los problemas parecen insolubles y los riesgos sobredimensionados y vencidos hacia el lado del fracaso. Pero no es lo que nos muestra la Historia», ha recordado.
A este respecto, Felipe VI ha abogado por recuperar el optimismo y la confianza, aprendiendo del pasado, para enfrentar el futuro. «Recuperar y potenciar el optimismo y la confianza en nuestras fuerzas y en nosotros mismos es un primer paso necesario para avanzar hacia sociedades más libres, más integradas y más prósperas», ha afirmado.
Tres encuentros desde el exilio del emérito
Pese al ‘no encuentro’ de este jueves, y teniendo en cuenta el que sí se dará a finales de octubre, Felipe VI y Juan Carlos I se han visto en persona sólo en tres ocasiones después de que este último decidiese marchar hacia Emiratos Árabes Unidos sin fecha determinada de retorno, en agosto de 2020, cuando estableció su residencia en Abu Dabi.
La de esta semana ya es la cuarta visita que realiza el monarca emérito a España desde entonces, y fue en la primera, en mayo de 2022, cuando mantuvo una reunión privada con Felipe VI en Zarzuela. En aquella ocasión, más de año y medio después de su marcha al país del Golfo, el emérito visitó la que fuera su residencia durante décadas por espacio de once horas. Entonces, padre e hijo mantuvieron «un amplio tiempo de conversación» que no se quiso cuantificar en el que abordaron «cuestiones familiares así como sobre distintos acontecimientos y sus consecuencias en la sociedad española» desde que el emérito se trasladó al país del Golfo, en plena polémica aún por las investigaciones judiciales en torno a la persona del antiguo monarca.
Posteriormente, se han dado dos ocasiones más de encuentro. La primera, hace apenas un año, en el funeral de la reina de Inglaterra, Isabel II, en Londres; donde el protocolo obligó a sentar a los eméritos y a los monarcas actuales juntos en la Abadía de Westminster.
La última vez que coincidieron fue en enero, cuando ambos asistieron en Atenas al funeral de Constantino de Grecia, hermano de la Reina Sofía. Entonces, la televisión pública griega difundió unas imágenes en las que el rey daba un afectuoso saludo a su padre y ambos intercambiaban unas palabras.