Wall Street cotiza con compras este jueves tras el signo mixto del miércoles, en una sesión en la que los bonos volvieron a ser los protagonistas, después de que el rendimiento del Tesoro a 10 años alcanzase su nivel más alto desde 2007. A destacar, el S&P 500 consiguió rebotar de nuevo desde la media de 200 sesiones.

Los inversores están muy atentos al mercado de deuda y al precio del petróleo, que sigue disparado, lo que ha aumentado las preocupaciones sobre su impacto en una inflación que todavía se mantiene lejos del objetivo del 2% marcado por la Reserva Federal (Fed).

«La liquidación de bonos continúa debido al drama del gobierno estadounidense. A pesar de que Neel Kashkari dijera que EEUU podría necesitar más de una subida más de tipos para controlar la inflación, las inminentes conversaciones sobre el cierre del gobierno, las huelgas de Detroit y algunos datos económicos débiles publicados últimamente insinúan que puede ser ambicioso apostar por más subidas de tipos«, afirma Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank.

En la agenda económica de este jueves, los inversores han conocido la tercera lectura del PIB del segundo trimestre, que ha confirmado el crecimiento del 2,1%, y los datos de paro semanal, que ha subido menos de lo esperado.

EL PETRÓLEO SIGUE DISPARADO

El precio del petróleo sigue disparado. El barril Brent, de referencia en Europa, roza los 96 dólares (-0,67%, 95,90 dólares) mientas que el West Texas, de referencia en EEUU, se sitúa en 92,86 dólares (-0,88%).

A los recortes de producción de Arabia Saudí y Rusia y la caída de las reservas estadounidenses, se suma a las preocupaciones sobre el impacto de la escasez de suministro mundial del ‘oro negro’. Asimismo, el repunte de los precios de la energía ha reavivado los temores inflacionistas en todo el mundo.

«La preocupación más amplia es lo rápido que pueden retroceder las presiones inflacionarias en un momento en que los precios del petróleo continúan subiendo, con los precios del Brent acercándose cada vez más a los 100 dólares por barril y qué efecto tendrá en la economía mundial», explica Michael Hewson, analista jefe de mercado de CMC Markets UK.

Para los expertos de Danske Bank, «la subida de los precios de la energía se sumará a la presión inflacionista y respalda la opinión de que los bancos centrales mantendrán los tipos ‘más altos durante más tiempo‘».

ANÁLISIS TÉCNICO

Tras las últimas caídas, el S&P500 sigue bajo presión. A pesar del apetito insaciable por la inteligencia artificial (IA), el aumento de los rendimientos amenaza las valoraciones.

«Hay una importante zona de soporte cerca de los 4180/4200 puntos, que protege la media de 200 sesiones; y el principal retroceso de Fibonacci del 38,2% del rally del año pasado. Si se pierde ese soporte, el índice entrará en una zona de consolidación bajista a medio plazo y las ventas masivas podrían profundizarse hasta finales de año», indica Ozkardeskaya.

EMPRESAS Y OTROS MERCADOS

En el plano empresarial, Micron Technology cae cerca de un 5% tras registrar pérdidas mayores de lo esperado en el primer trimestre fiscal. La compañía ha dicho también que está trabajando para convertirse en proveedor de Nvidia.

Además, según publica ‘The Wall Street Journal’, los usuarios del nuevo iPhone 15 de Apple están quejándose por el sobrecalentamiento del teléfono al utilizarlo, lo que puede provocar presión bajista adicional para la compañía más importante del mercado americano.

En otros mercados, el euro se aprecia un 0,47% ($1,0549), y la onza de oro gana un 0,02% ($1.891). Además, la rentabilidad del bono americano a 10 años se revaloriza al 4,649% y el bitcoin sube un 1,07% ($26.522).