El tiempo ya empieza a correr para el PSOE. Con el primer ‘no’ del Congreso a Alberto Núñez Feijóo, que el próximo viernes cosechará el rechazo definitivo a su investidura, los socialistas se disponen a acelerar la negociación para lograr que Pedro Sánchez sea reelegido. Tienen dos meses por delante. Si el 27 de noviembre no han sellado un pacto con Sumar, ERC, Junts, EH Bildu, el PNV y el BNG, se convocarán automáticamente nuevas elecciones generales. Pero los colaboradores del presidente en funciones descartan esta hipótesis. Cuentan con alcanzar el acuerdo de investidura mucho antes, para acabar octubre ya con el Gobierno en pleno ejercicio de sus facultades. La derrota de Feijóo este miércoles solo ha contribuido a que su optimismo aumente.
El líder del PP, según fuentes de la dirección del PSOE, presionó al jefe del Estado para que le designara candidato a la investidura, pese a saber que no tenía ninguna posibilidad de llegar a la Moncloa, solo con el objetivo de apuntalar su “débil” autoridad en su propio partido. “Feijóo está utilizando el encargo del Rey como plataforma para tratar de afianzar su puesto en el PP, sin ninguna intención de presentar un programa de gobierno que la cámara pueda valorar y votar en consecuencia. El panorama de propuestas de Feijóo es un páramo yermo en el que solo se escuchan aplausos de su propia bancada”, señalaron en la cúpula socialista.
El contraste
Los colaboradores de Sánchez juegan en todo momento al contraste con su principal adversario. El presidente en funciones rechazó intervenir el martes, para evitar así que el debate se convirtiera en una cara a cara entre Feijóo y él sobre la polémica amnistía del ‘procés’. Pero este jueves protagonizará un discurso ante la plana mayor de los socialdemócratas europeos en el que, explican en su entorno, pondrá a España de ejemplo de cómo se puede “parar a la ultraderecha”.
No se esperan, aun así, pistas sobre las negociaciones con los independentistas y nacionalistas. El PSOE, de momento, sigue diciendo que este es el momento del líder del PP, y así seguirá hasta el viernes.
“Feijóo ha cosechado una buena retahíla de noes a su investidura -concluyeron los socialistas-. No parece importarle, porque ni estos días ni el mes y pico que ha hecho perder a los españoles tenían como objetivo una investidura clásica. La investidura ‘fake’ de Feijóo estaba diseñada para que nadie le mueva la silla en el PP, en un momento en el que desde muchos territorios se mira al dirigente gallego con lupa. Los socialistas esperamos el final de esta farsa, que caiga el telón cuanto antes y Feijóo finalice su triste periplo por la política nacional”.
