«Lo mejor, pese al intento del PSOE de dinamitar la investidura, es proseguir con normalidad el debate y acreditar el nivel de deterioro institucional». De esta forma ha comenzado Alberto Núñez Feijóo su turno de respuesta al tercer grupo parlamentario de la primera sesión tras la intervención de un Óscar Puente convertido en protagonista. Una réplica que, sin embargo, ha rechazado completar con los socialistas minutos antes y que ha aprovechado la que le correspondía para Vox a afear a Pedro Sánchez que haya delegado la tarea de fijar su posición. Una obsesión que incluso Santiago Abascal le ha reprochado. Y es que ha explotado el guante de la ultraderecha, que ha embestido contra el presidente del gobierno en funciones al tiempo que ha celebrado el acuerdo con los populares, para agotar todo su tiempo en este mismo objetivo.
Feijóo insiste en el vacío de Sánchez
Tras esta primera frase, Feijóo ha continuado con sus minutos sin límite inicialmente dedicadas a contestar a Abascal para reprochar a Sánchez que no subiera en persona al estrado. «Sánchez sin EH Bildu, sin ERC, no es nadie. Entiendo que no venga porque no tiene cuajo de presentarle a España su proyecto político», ha sostenido para insistir. «No habla en esta tribuna porque no soporta haber perdido las elecciones. No soporta hablar después de que cinco veces que se ha presentado no haya conseguido nunca el número de diputados que conseguí yo en mi primera vez», ha dicho para después criticar su supuesta cesión a los independentistas -concretamente a Junts per Catalunya- con la amnistía. «Que Puigdemont decida si Sánchez será presidente o no es una anomalía democrática sin precedentes«, ha sentenciado.
Pero el candidato a la presidencia ha dedicado casi todo el lapso de contestación a cargar contra el secretario general socialista, de nuevo también por la elección de la fecha para los comicios. «Esta tarde hemos podido ver que el PSOE ha pasado a la clandestinidad en los pactos de Estado. Es evidente que las diferencias entre PP y Vox son notorias, nunca he ocultado mi objetivo de hacer un gobierno del PP, pero tampoco oculto que muchas veces he creído que con ustedes no les ha ido mal al gobierno socialista, lo que es evidente es que Sánchez puso las elecciones el 23J por algo: para no darle cuentas a su partido de la derrota sin paliativos el 28M, ha liquidado al PSOE en el ámbito territorial, una de las razones por las que Puente ha hablado, está aquí gracias a Sánchez», ha esgrimido Feijóo, presentado como líder de la oposición.
Voy a insistir en intentar entenderme con el PSOE
En la sala de prensa, a una hora más cercana a las seis de la tarde que a las 12 de la mañana del arranque, los periodistas intercambiaban miradas por las continuas menciones a Sánchez en vez de a Abascal, que ha alternado sus críticas al que ha dicho es «el peor gobierno de la historia» con sus aplausos a los pactos con los populares en municipios y autonomías. También alguna llamada al orden para «cumplir» lo acordado. «Es un comienzo que aceptamos para una alternativa nacional», ha sostenido con un tono sorprendentemente cauto antes de dedicar también algunas menciones a los independentistas catalanes o incluso a Sumar. Feijóo les ha devuelto la buena actitud con agradecimientos y promesas.
Sin embargo, ha persistido en sus ataques y críticas llegando a recuperar de nuevo un mantra que ya parecía apartado por la cúpula nacional el PP: el sanchismo. En este caso, se ha referido al «fraude sanchista». «Voy a insistir en intentar entenderme con el PSOE, porque tiene que ser mucho más que las relaciones de trabajo que la conforman. Que un partido esté secuestrado no significa que no debamos tenerle respeto por los dirigentes anteriores. Conozco a muchos socialistas que no están de acuerdo con el partido socialista de ahora«, ha añadido. Además, el presidente popular ha denunciado la suerte de «fango» que ha dicho ha emprendido Puente en su intervención. Del fondo de la declaración del líder ultraderecha, poco o nada. Y es que el PSOE se la relegado a la bancada de la oposición.
Abascal le afea la piel fina
Esto ha llevado a Abascal a dedicarle un dardo a Feijóo en su turno de réplica precisamente por este motivo. «Lo he visto afectado con que Sánchez no haya subido a contestarle, no le haga caso, por eso cometieron errores en la campaña», ha sostenido desde la tribuna. Eso sí, ha rebajado el tono con los populares, a los que se han abrazado -aunque mutuamente- de forma evidente en el primer asalto de la investidura. «No tenía que preocuparse por decir algo que me hubiese molestado porque nuestro sí es una declaración solemne y una decisión que se puede tomar ante la mayoría golpista», ha sostenido el líder de Vox., que le ha animado a «ir más allá». «Nosotros tenemos la lengua larga, pero la piel gruesa, lo hemos demostrado», ha valorado.
Asimismo, Abascal también ha sentenciado que «el fraccionamiento de la centroderecha ha sido la demonización de Vox». De hecho, a su juicio su origen «se dio durante el gobierno de Rajoy, con la mayoría absoluta del PP». «Al PSOE no le ha ido mal con Vox, a Zapatero no le fue mal con Rajoy porque todo lo que prometieron derogar lo mantuvieron. El gobierno de Rajoy explica la existencia de Vox, aunque no es simplemente una escisión del PP, porque defiende principios propios. PP y Vox no son lo mismo», ha querido clarificar el líder de Vox, que sin embargo ha evidenciado su buena relación con Feijóo, que en varias ocasiones ha agradecido su apoyo sin condiciones para una votación que nace fallida. Menciones al presidente en funciones también ha dedicado en su contestación posterior a Sumar.