Este martes, la selección campeona del mundo disputaba un encuentro de Nations League contra Suiza. El primero en territorio nacional desde que el cuadro de Alexia y compañía consiguiera la primera estrella en el pecho. Y no me puede sorprender más que desde LaLiga no se pusiera otro horario para los Sevilla-Almería y Mallorca-Barcelona. Tratar de unificar esos dos partidos a las 19:00 y permitir que ellas tuvieran esa franja para ellas solo no era mucho pedir y además habría permitido tener todos los focos puestos en las actuales campeonas del mundo. Es un detalle menor pero es un detalle que a nadie en el fútbol español se le ocurrió. Y eso demuestra que la lucha tiene que continuar para tener mejor trato por parte de todas las autoridades. Porque si alguien podía cambiar su horario para permitir al combinado nacional gozar de ese protagonismo era LaLiga. Pero seguramente a Tebas no le apetecía cambiar nada para beneficiar a la selección española femenina. Lo cual demuestra qué tipo de presidente tiene en estos momentos una competición que año a año es todavía peor.