La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha utilizado la Asamblea de Madrid para saltarse la censura impuesta desde la dirección nacional del Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo. La lideresa madrileña ha utilizado una treta habitual en la Asamblea, consistente en responder a una pregunta de su propio grupo parlamentario, que le ha puesto botando la pregunta sobre la amnistía que reclaman los independentistas, para así poder soltar el discurso nacional contra el Gobierno de Pedro Sánchez que Génova 13 le ha prohibido hacer en la manifestación de este domingo.

La oposición de Más Madrid, liderada por Mónica García, y del PSOE de Madrid, con Juan Lobato, traían este jueves a la sesión de control al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso preguntas sobre vivienda para los jóvenes y educación, respectivamente. Y, aunque Ayuso ha colado sus perlas habituales sobre política nacional, la traca final la reservaba para la pregunta de su portavoz, Carlos Díaz-Pache, que en nombre del grupo parlamentario inquiría sobre “las consecuencias que para Madrid tendrá la eventual aprobación de una Ley de Amnistía”.

Esta práctica de filibusterismo político es tradicional en la Asamblea de Madrid con el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, mientras que, por ejemplo, en el Congreso de los Diputados no ocurre desde que gobierna Pedro Sánchez salvo muy contadas excepciones y los diputados que forman parte de los partidos de la coalición de gobierno no preguntan en la sesión de control, aunque sí era habitual en la época de Mariano Rajoy y con sus ministros. 

En cambio, en Madrid es ya tradición ver a los sucesivos portavoces (Enrique Ossorio, Alfonso Serrano y ahora Díaz-Pache) usarla para realizar preguntas de lucimiento de la presidenta y con las que sacar pecho de sus logros. Pero no es tan típico utilizar la maniobra de una manera tan evidente para hacer oposición nacional.

Ayuso ha emprendido entonces el discurso que tenía preparado para su barra libre de tres minutos y que bien podría haber sido la arenga que este domingo le ha prohibido pronunciar la dirección nacional de Feijóo en el mitin que celebran en la plaza de Felipe II de Madrid. En Génova 13 ha cundido el pánico y, además de reducir el aforo de su acto para evitar un pinchazo (han cambiado la idea inicial de citarse en Plaza España por una localización mucho más reducida en pleno barrio de Salamanca), han empezado a fletar autobuses de toda España para evitar el fiasco. 

Entre las estrategias desplegadas, la dirección del PP nacional también ha dado dos directrices. La primera, mensajes a los militantes para que no se repitan escenas como los vítores de “¡Ayuso, Ayuso!” que empañaron aún más la noche electoral y que nublaron el rostro de Feijóo en el balcón de Génova. Pero, además, se ha vetado que Ayuso pronuncie un discurso, como sí harán Feijóo y los expresidentes José María Aznar y Mariano Rajoy. Algo inaudito porque es tradición que el líder regional del partido también dé un discurso, más aún si preside la comunidad anfitriona.

Ayuso ha lanzado un discurso que iba mucho más allá de las paredes de la Asamblea y en la que ha apelado “a los extremeños sin tren” o a los ciudadanos del mundo rural que están abandonando sus provincias. “Dice el presidente del Gobierno que lo va a tragar todo, que va a decir que sí por adelantado a todo. Espero que haya una respuesta en las calles de toda España ante esta ignominia”, ha proclamado Ayuso, que ha llegado a lamentar “cuánta ignominia, cuánto dolor” como reacción a la llegada de las lenguas cooficiales en el Congreso de los Diputados. 

“El presidente del Gobierno sostiene que el golpe de Estado estuvo bien dado y que no es ilegal. Que lo que es ilegal es España”, ha lamentado Ayuso, que ha acusado a Sánchez de intervenir y atacar el Poder Judicial y de tratar a las fuerzas policiales “como esbirros”. “El independentismo se ha comportado como una auténtica corrupción, todo a través de sobornos que pagan los extremeños que no tienen tren y las zonas despobladas”, ha dicho la presidenta madrileña, “dicen que les tenemos que dar más dinero y ¿quién lo va a pagar? ¿los madrileños?”.

Más Madrid habla de vivienda

Por su parte, la líder de Más Madrid, Mónica García, ha acudido a la Asamblea para cuestionar la incapacidad del Gobierno de Ayuso de repartir las ayudas al alquiler para los jóvenes. Unos bonos financiados por el Gobierno de España, que ha entregado a la Comunidad de Madrid una partida de 32 millones de euros de la que el Gobierno regional apenas ha conseguido entregar a sus beneficiarios, como ha denunciado ElPlural.com. 

“Usted ha confiscado los 32 millones de euros que le ha dado el Gobierno, ha denunciado García, que ha reprochado a Ayuso que haya instalado una “barra libre a los fondos buitres” en la Comunidad de Madrid. “No hay nada menos castizo que vender a fondos buitres ni nada menos madrileño que un barrio sin vecinos”, ha denunciado la líder de Más Madrid, que ha acabado reclamando a la presidenta del PP que “trabaje por los jóvenes y págueles lo que les debe”. 

Ayuso manda callar: «¡Se lo digo en español!»

Por su parte, Ayuso ha reprochado a García que se está comportando en materia de vivienda como Ada Colau “y mire cómo le ha ido, siga usted el mismo camino”. La presidenta ha reprochado a la oposición que se fijen en sus malas cifras de vivienda y no en las de “otras comunidades como Cataluña, que tienen un 62% de población sin dar la ayuda”. 

Además, Ayuso ha contrarrestado las críticas prometiendo una “nueva convocatoria de ayuda a la vivienda de 9 millones” y ha acusado a la izquierda de imponer “políticas liberticidas” en toda España que llevan a que “las provincias se están vaciando porque eligen venir a vivir a Madrid”. En un momento dado, la lideresa madrileña ha elevado la voz para mandar callar a los diputados de la oposición: “Escuchen, estoy hablando yo ahora, que para eso estamos en un parlamento y hablando en español”.

Lobato trata la educación

Por su parte, Lobato ha optado por hablar “de educación con educación” y ha reprochado a Ayuso que Madrid tiene una “tasa de abandono escolar del 14%, muy por encima de muchas regiones del país” y que el 50% de esta lacra se produce en Madrid, además de unas altas cifras de paro juvenil. “Céntrese en esto, señora Ayuso, en lugar de moverle la silla a Feijóo el próximo domingo, que éste es su trabajo”, ha dicho Lobato.

“Lo importante está fallando y una región como Madrid que es la más rica de España no puede estar en el puesto 93 de productividad de Europa”, ha dicho el líder del PSOE de Madrid, que cree que la región “tendría que estar tirando de los datos de España, pero para arriba, no tirando para abajo”. “La educación es lo que va a definir lo que somos en los próximos 10 o 15 años, y no sus numeritos del día para Twitter o Tiktok”, le ha reprochado Lobato.

Unas palabras ante las que Ayuso ha reaccionado le ha pedido respeto, “aunque si no le tiene respeto ni a Nicolás Redondo, qué le puedo pedir”. “Yo no sé de dónde se saca usted los rankings, pero siempre tiene la oportunidad de meter la pata”, ha reprochado la madrileña a Lobato. “Aprenda y sea un representante de Madrid orgulloso de lo que está haciendo este gobierno”, ha dicho a Ayuso, que ha acusado a Lobato de sacar trimestres del INE en lugar del conjunto del año, “donde el fracaso escolar y el paro juvenil es mejor que en el conjunto de España”.