Tras la ponencia que el secretario general del PSPV-PSOE y expresidente de la Generalitat, Ximo Puig, ofreció en el Club INFORMACIÓN para presentar su libro, «Una idea de esperanza», se abrió un turno de preguntas, en las que la mayor parte de las cuestiones giraron en torno al presente y futuro a corto plazo de la política autonómica y nacional, esta última marcada, sobre todo, por el proceso de investidura abierto tras el 23 de julio y las opciones del popular Alberto Núñez Feijóo y el socialista Pedro Sánchez de presidir el país. A Puig también se le preguntó sobre sus opciones de ser ministro de Política Territorial en un hipotético nuevo Gobierno de Sánchez, cuestión ante la que echó balones fuera, ya que señaló que actualmente está centrando en su labor de «hacer una buena oposición» al Consell que forman el PP y Vox.
En las preguntas sobre la investidura se habló de la posible amnistía al independentismo catalán y de las aspiraciones soberanistas, una «aventura» que Puig considera que ha llegado a su final: «Los catalanes han evidenciado que la aventura del soberanismo ha acabado. Otra cosa es la digestión de los líderes indepedentistas. Puigdemont no puede hablar en nombre de Cataluña». Volviendo a la investidura, añadió: «Los ciudadanos votaron y hay que dar, en la medida de lo posible, un Gobierno en realidad a lo que ha pasado, no a los nos gustaría a cada uno.
La presencia de Puig contó con el respaldo de buena parte de los rostros más visibles de los socialistas en la provincia. Entre los asistentes al acto se encontraban la delegada del Gobierno en la Comunidad, Pilar Bernabé, y el subdelegado en la provincia, Carlos Sánchez. También se pudo ver a la síndica socialista en las Cortes, Rebeca Torró, a la portavoz municipal en Alicante, Ana Barceló, al alcalde de Alcoy, Toni Francés, al expresidente de la Diputación Antonio Mira-Perceval, al actual portavoz en la institución provincial, Vicente Arques, al director general de Casa Mediterráneo, Andrés Perelló, o los exalcaldes de Elche Carlos González y Diego Maciá.
El sector empresarial también siguió en directo la intervención de Puig, con la presencia, entre otros, de Antonio Arias, Toni Mayor, José Juan Fornés, Juan Riera, Luis Consuegra o Jesús Navarro. En cuanto a la representación socialista, contó con la presencia de diputados en las Cortés, como Yaissel Sánchez, Rosario Navalón, Mario Villar, Laura Soler o Ramón Abad. También se pudo ver a Emilio Soler, Antonio Rodes, Toñi Serna, Miguel Millana, Eva Montesinos o al exsenador Ángel Franco.
La ronda de preguntas se abrió a los asistentes al acto. Entre ellos, tomaron la palabra el que fuera conseller de Puig Manuel Alcaraz y el que fuera presidente de las Cortes Valencianas Antonio García Miralles. Sus reflexiones dieron pie a que el secretario generales del PSPV compartiera nuevas ideas sobre la reforma de la Constitución, el modelo autonómico o el federalismo. Tras hablar Alcaraz, Puig dejó una visión sobre el peso que tiene que tener la cultura para abordar algunos de los retos que se plantean, como el de la inteligencia artificial. «Las identidades existen. El drama de España es que los que creemos en la diversidad parecemos antiespañoles. No se puede ser español como unos quieran», señaló el expresidente de la Generalitat tras escuchar la intervención protagonizada por García Miralles.