El ‘president’ Pere Aragonès acudirá el martes de la semana viene al debate de política con varios objetivos, entre ellos, convencer a la oposición y a los catalanes de que su ejecutivo trabaja a buen ritmo y que ya ha cumplido con el 60% del plan que el Govern que comprometió a aplicar a principios de la legislatura. Son nueve puntos más respecto a la última vez que hizo balance hace seis meses.
El Executiu se ha reunido este martes y ha analizado el cumplimiento de este plan, una suerte de ‘hoja de ruta’ que Aragonès diseñó a principios del mandato y que tiene cuatro años para implementar. Según se desprende de los resultados presentados por la Generalitat, los dos ámbitos con los que más cumple la administración catalana són con la Acción Exterior y con la Agenda Rural. En el primer caso ya ha llegado al 72% de los objetivos mientras que en el segundo ha llegado al 71%. También figuran en posiciones destacadas el cumplimiento en materia de Seguridad (63%); de Cultura y Lengua (63%); Justicia (62%) y Feminismos (61%).
Lo más destacado de este rendimiento de cuentas no es tanto cómo se autoevalúa el Govern, sinó que los datos són públicos y pueden consultarse través de internet. Es decir, que la Generalitat tiene que justificar porqué se puntúa de esta manera. Si como ejemplo nos fijamos en Acción Exterior, allí se puede analizar una por una las 15 medidas que se había comprometido a llevar a cabo el departament en este ámbito.
Pero también hay materias en las que la Generalitat debe mejorar y así se refleja en este mismo plan de Govern. Aquellas carpetas en las que el Govern no avanza a buen ritmo són Políticas Digitales y Gobierno Abierto -Transparencia-. Son las dos únicas en las que no supera el 50% del cumplimiento: en el primer caso se queda en el 49% y en el segundo en el 43%.
Tercer debate com ‘president’
Aragonès presentará estos datos en el debate de política general del martes que viene, el tercero al que se enfrenta desde que fue investido ‘president’. Esta vez, sin embargo, lo hace en un contexto mucho más complicado ya que por primera vez lo hará gobernando en solitario. En este mismo debate del año pasado aún aguantaba la coalición entre ERC y Junts y fue precisamente en aquel pleno cuando empezó a resquebrajarse.