La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, se ha sumado hoy a los actos de conmemoración de la patrona de la Comunidad Autónoma, la Bien Aparecida, en Ampuero, donde ha informado de los primeros pasos que está siguiendo el Ejecutivo para la elaboración del proyecto de Presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2024, tras aprobar esta semana un techo de gasto –el límite de gasto no financiero, excluida la deuda- de 3.159 millones, frente a los 3.051 de este año, un 3,54 por ciento más.
Pese al escenario de incertidumbre por la situación política nacional, Cantabria “contará con un presupuesto realista, prudente, responsable y expansivo” en el gasto, ha anunciado la presidenta cántabra, quien ha asegurado que las cuentas públicas permitirán al Gobierno regional atender las prioridades de los cántabros.
Entre las principales prioridades del proyecto de presupuestos para el próximo año, la presidenta ha citado la reforma fiscal, el impulso a la inversión, el fortalecimiento de los servicios públicos y esenciales, la estrategia de simplificación administrativa y ayudar a las familias. Todo ello, sin aumentar la deuda, cerrando “la cuadratura del círculo”, ha remarcado Buruaga, quien ha asegurado el diálogo y el entendimiento necesarios para sacar adelante el objetivo más importante en el presente curso político.
En su intervención ante los medios de comunicación presentes en el entorno del Santuario de Hoz de Marrón, Buruaga ha pedido a la Virgen Bien Aparecida que “cuide de su pueblo”, así como “ayuda y acierto” para hacer frente a las dificultades, tomar “las decisiones correctas” y ofrecer, así, a la ciudadanía “la respuesta y soluciones que esperan” de este Gobierno y su presidenta.
Según Buruaga, este curso político, el primero de la legislatura, va a ser “clave” para el futuro de España y de Cantabria, y ha insistido en la “extraordinaria preocupación” existente ante un posible nuevo gobierno nacional que “fuerce” el orden constitucional, “entregue” la gobernabilidad de España “a quienes quieren descuartizarla” y sea capaz de “liquidar” la igualdad entre todos los españoles, en referencia a las conversaciones que mantiene el presidente del Gobierno en funciones Pedro Sánchez con el expresidente de Cataluña, Carles Puigdemont (Junts), y que pasan, entre otras cuestiones, por una amnistía para los implicados en el procès.
En clave regional, la presidenta ha destacado la determinación del nuevo Gobierno cántabro para sacar adelante el “proyecto de cambio iniciado”, y que es “imparable”. Ha valorado que, pese a que no han pasado ni cien días de un nuevo Gobierno en Cantabria, “ya se siente el cambio en Cantabria”, tanto en el fondo como en las formas y, “sobre todo, en los resultados”.
En este objetivo, ha apuntado la formación de equipos “solventes” en todas las consejerías, el establecimiento de un diagnóstico “certero” de situación que permite ya tomar decisiones y afrontar las dificultades, así como “desbloquear la parálisis” que existía en la región. “Tenemos un ritmo marcado de esa Cantabria de las oportunidades y estamos en condiciones de empezar a cumplir nuestros compromisos de investidura”, ha concluido.
Junto a centenares de cántabros que hoy han realizado la subida al santuario de Hoz de Marrón, la presidenta de Cantabria ha participado, además, a mediodía, en la misa solemne que ha celebrado el obispo de la Diócesis de Santander, Manuel Sánchez Monge, en la campa exterior del santuario.