Llega el buen tiempo a nuestras vidas, los meses de largos puentes como abril y mayo y las primeras semanas de vacaciones. Hoy en día es habitual aprovechar unos pocos días para maximizar al máximo los días libres y para ello la opción más rápida y socorrida es el avión. Un viaje exprés de ida y vuelta.
Con las prisas del último momento, llegar al aeropuerto a la hora, comprobar nuestros equipajes, móvil, cargador… todo. Pero en ese momento de revisión se nos puede olvidar algo fundamental y que debes tener controlado antes de subir al avión.
Evita una sorpresa al subir al avión con este sencillo gesto
Si no te has dado cuenta a la hora de comprar tu billete de avión para empezar esas deseadas vacaciones, estás a tiempo antes de subirte.
Habitualmente pensamos que cuando nos subimos al avión solo hay dos categorías de pasajeros. La realidad es que en algunos casos hay hasta tres: económica, ejecutiva y primera. No obstante en la mayoría de aerolíneas tienes que pagar algo más para poder elegir el asiento en el que quieres viajar. La otra opción es no pagar y que se te asigne una plaza aleatoria.
La mayoría de pasajeros prefiere viajar en la ventanilla para aprovechar las preciosas vistas durante el vuelo, sin embargo, hay gente que también prefiere más adelante o más hacia atrás de las alas de la aeronave.
Así pues en los aviones comerciales habitualmente hay tres hileras de pasajeros a la derecha y a la izquierda con un pasillo en medio. Los asientos se dividen a su vez en orden alfabético acompañados del número de fila. Estos van desde la A a la F. Así pues si quieres acabar viendo el paisaje deberás elegir el A o el F, mientras que el resto de letras corresponden C y D al pasillo y B y E en medio.