En la última década, el Valencia CF y el Atlético de Madrid han sido y son la noche y el día como clubes. Históricamente, ambos son considerados como tercer y cuarto mejor equipo español por detrás de los dos gigantes, pero desde que llegó el Cholo Simeone al Calderón (ahora Metropolitano), y tres años más tarde Meriton a Mestalla, han seguido rumbos muy distintos. El ejemplo más evidente de la diferencia abismal entre ambas entidades está en el banquillo. Y es que desde que Simeone firmó con el Atlético en diciembre de 2011, el Valencia ha sufrido un total de 21 cambios de entrenador. Números incompatibles con un proyecto estable.
En las 13 temporadas (contando la actual) que el Cholo es jefe de filas colchonero, el palmarés rojiblanco es digno de elogio: dos títulos de LaLiga, dos Europa League, dos de Supercopa de Europa, una Copa del Rey y una Supercopa de España. Nueve títulos en total. En la memoria colchonera pesan, sin embargo, las dos finales de Champions perdidas en 2014 y 2016. Rozaron la ‘Orejona’, máxima competición de clubes internacional, pero murieron en la orilla en ambas ocasiones.
Un guion casi idéntico sufrió el Valencia a comienzos del siglo. Tanto en la 2000/01 como en la 01/02 alcanzó la gran final pero en ambas terminó sucumbiendo. Por aquel entonces era, como el Atleti hoy en día, el indiscutido tercer mejor equipo español, también por el ritmo de títulos en los primeros años del siglo. Esa ya no es la realidad que se vive en Mestalla. Ahora el valencianismo está acostumbrado a pelear por no sufrir en liga y a recibir a un nuevo entrenador por temporada, a veces incluso más.
Un Unai Emery que daba sus primeros pasos en los banquillos entrenaba al Valencia cuando el Atleti fichó al Cholo. En 2012 salió del club y antes de entrar en 2013 pasaron hasta tres nombres más por Mestalla: Pellegrino, Voro y Ernesto Valverde. Aún sin Meriton. El Txingurri no encontró estabilidad y antes de terminar el año asumió las riendas Djukic, que tras un breve paso dejó su sitio a Juan Antonio Pizzi. El argentino terminó la temporada 13/14 al mando y se ganó la continuidad a pulso. Sin embargo, ese año fue el del desembarco de Meriton y Lim tenía otros planes. En concreto el plan Nuno Espírito Santo.
El portugués también comenzó el curso 15/16 pero antes de completar la primera vuelta fue sustituido por Gary Neville con previo paso de Voro una vez más. El inglés no funcionó y el elegido fue Pako Ayestarán, que tampoco salió bien. Llegó Cesare Prandelli que apenas duró tres meses en el cargo. El siguiente, con unos cuantos periodos más de Voro entre medias fue Marcelino García Toral. Con el asturiano se vivió lo más parecido a un proyecto estable desde que arrancó la ‘era Meriton’ con un título de Copa del Rey incluido.
La última etapa ha sido la puntilla para un proyecto que cae cuesta bajo y sin frenos. Albert Celades, Javi Gracia, José Bordalás y Gennaro Gattuso repartidos en cuatro temporadas. También con otras cuantas apariciones de Voro. En total 21 cambios de entrenador y 16 nombres distintos (contando a Baraja).
