Arnau Masnou es uno de los pasajeros que viajaba este domingo en el tren de Rodalies de la R3 que atropelló mortalmente a cuatro jóvenes que cruzaban la vía por un lugar no autorizado en Montmeló (Barcelona). «El tren acababa de salir de Parets y, al cabo de dos o tres minutos, se ha escuchado un impacto muy fuerte, el tren ha temblado y ha parado de golpe», ha relatado este usuario a la emisora RAC1.
Dentro del tren se vivieron momentos de confusión y de angustia. «Nadie sabía qué había pasado y nos dijeron que habían atropellado a alguien. Después nos han confirmado que siete personas habían intentado cruzar la vía», ha contado Masnou. Los 170 pasajeros no han sufrido heridas y solo una mujer con asma tuvo que ser atendida por los servicios de emergencias.
Las víctimas del atropello mortal en Montmeló son tres chicas y un chico. Dos de ellas de 22 años, otra de 19 años, y un joven de 21 años. Así lo informó el director de los Mossos d’Esquadra, Pere Ferrer, quien visitó el lugar de los hechos acompañado del alcalde de la localidad, Pere Rodríguez, entre otras autoridades.
Los jóvenes formaban parte de un grupo de siete personas que cruzaban las vías de la línea R3 por un lugar prohibido para dirigirse a un festival de música hard tecno DURO que se celebraba en los alrededores del Circuit de Barcelona-Cataluña. Los otros tres acompañantes fueron trasladados leves al hospital de Mollet del Vallès.
Paso sin valla de uso recurrente
Aunque las vías quedan protegidas por una valla perimetral a su paso por la zona de viviendas, los jóvenes han accedido a ella por un punto en el que termina el cercado y donde queda solo un camino de tierra de unos 50 centímetros de ancho.
Vecinos de la zona han explicado que a pesar de las vallas, el espacio es de uso recurrente para varios visitantes del circuito o de eventos que se realizan en su entorno. «Cuando esta mañana hemos ido de casa ya había mucha gente pasando caminando, no encuentran impedimentos aunque no hay ningún acceso ni al circuito ni a ninguna parte», explicaba Vicente Mayor, vecino de la zona.
Sin embargo, reconoce que la gente lo hace sin miramientos, dado que hay vallas: «El acceso está prohibido», recalca. Sin embargo, cree que habría que establecer vallas fijas que cubrieran todo el trazado de vías, no sólo lo que da directamente a las casas.
El Ayuntamiento ha convocado para este lunes un minuto de silencio a las 12:00 h en la plaza Rafael Casanova.