«Siebe ha resuelto muy bien sus acciones», aseguraba con satisfacción el técnico Javier Aguirre tras el encuentro ante el Athletic en Son Moix (0-0). Ha habido que esperar hasta la cuarta jornada para que Van der Heyden, por el que el Mallorca pagó este verano un total de 2,5 millones de euros, más otro en variables, debutara. Y causó una buena impresión.

Con la lesión de Raíllo, que estará de baja hasta diciembre, los bermellones no van nada sobrados en esta posición, por mucho que en el último día de mercado de fichajes se recuperara a Nastasic. Por eso el esperanzador nivel que mostró el belga ante los hermanos Williams, Guruzeta y compañía permite ser optimistas. Está por ver cómo evoluciona su rendimiento, pero dejó claro que está preparado para jugar. 

Van der Heyden actuó en el costado izquierdo y se mostró atento al corte, contundente y rápido a la hora de recular. No cometió errores de bulto y no se complicó con el balón en los pies. Incluso dispuso de una ocasión con un remate de cabeza que se fue desviado tras un centro de Sergi Darder. Ahora es Aguirre el que decidirá si le da continuidad en Vigo ante el Celta, pero todo apunta a que sí gracias a un dato que lo refuerza. El Mallorca dejó ante los vascos la portería a cero por primera vez este curso.

La competencia directa del ex del Royal Union Saint-Gilloise es Copete, al que el preparador mexicano le dejó un recado en rueda de prensa. «No puede relajarse, hay que espabilar, el que se duerme se va a un costado», dijo ante los periodistas tras haber apostado por el andaluz en las tres primeras jornadas.

Da la impresión de que Aguirre solo contempla a Van der Heyden en el costado izquierdo de la zaga de tres defensas y no en el centro del eje, reservado para Valjent o incluso Nastasic, que aunque también es zurdo ya ha deslizado que se plantea ubicarle en ese lugar y que el eslovaco se pase a la derecha. Eso dejaría fuera del once a Gio González, un carrilero que se ha visto obligado a jugar en ese lugar tras la lesión de Raíllo y el tardío fichaje del serbio.

Aprende español

Van der Heyden, de 25 años y 1,85 metros, ha causado una muy buena impresión en Son Bibiloni. Tiene un carácter alegre y bromista y ya aseguró en su primer día como mallorquinista que quería aprender español para integrarse lo antes posible. Y no fueron palabras vacías porque ya se atreve con algunas palabras y expresiones. Había visitado la isla como turista y quedó enamorado, algo que le ayudó a la hora de querer vestir de bermellón. «Estuve de vacaciones y es un lugar muy bonito para ir y mis amigos me dijeron lo mismo, que tenía que ir ahí. Pero por supuesto que ficho por el Mallorca por razones deportivas», dijo a este diario en Austria nada más firmar con su nuevo club.

Además, es un jugador temperamental y que ejercía de líder en su anterior equipo, con el que disputó 32 partidos de Liga y marcó un gol, además de jugar dos encuentros en la previa de la Champions League. Su sueño es seguir siendo internacional -ya lo fue una vez- y sabe que eso pasa por ser importante en Son Moix. Está en ello.